El Museo de la Verdura ofreció una visita guiada a la exposición de útiles en miniatura de Gregorio Muñoz García

Gregorio Muñoz García tiene 84 años y es el autor de una colección que supera las cuarenta miniaturas de aperos de labranza y otros utensilios de antaño como los del oficio de alpargatero o de la matanza.

Su obra se expone de forma permanente desde el mes de abril en tres vitrinas situadas en la sala de usos múltiples del Museo de la Verdura y el sábado por la tarde fue el propio autor quien atendió a los curiosos que se acercaron a la visita guiada prevista en el programa de Navidad.

«He estado toda mi vida vinculado a la enseñanza profesional y mi padre era agricultor. En su honor hice estas piezas, herramientas empleadas para cultivar la tierra», comenta Gregorio. Como maestro industrial, trabajó todos los tipos de material, lo mismo madera que hierro, y abarcaba diferentes oficios.

La familia de Gregorio vino hace sesenta y cinco años a Calahorra procedente de Valdemadera, donde también nació este artista, que creó estas miniaturas como afición y en recuerdo a las labores agrícolas que vio realizar a su padre.

La muestra incluye reproducciones de herramientas para partir las cañas que se emplean para fabricar los cañizos, un banco de alpargatero, gramadora, carros, galera, trillas, arados, cántaros y cernedora. De la matanza tiene un banco con un cerdo, cuchillos, cacillos, cubo y embudo para la sangre, choricera metálica (a tamaño natural), morcillera, cacillos para rascar y una rueda para afilar. La exposición cuenta además con figuras humanas, caballos y mulos que complementan las diferentes piezas y también presenta objetos originales como una hoz y una máquina choricera de metal.

Gregorio explicó a los visitantes las funciones de estas herramientas y respondió con entusiasmo las preguntas que le formularon.