Embalse del Perdiguero, con un par de carteles identificativos, uno de ellos señalando la prohibición de introducir embarcaciones en el agua. I. Á.

Calahorra
El embalse del Perdiguero podrá utilizarse para practicar deportes acuáticos

Los regantes autorizan ahora el uso recreativo de la balsa de agua mediante un convenio con el Ayuntamiento

Calahorra

Jueves, 12 de diciembre 2024, 07:33

El embalse del Perdiguero podrá tener un uso recreativo una vez que la Comunidad General de Regadíos de Calahorra, propietaria de esta infraestructura, lo ... acordó así en asamblea el pasado martes (62 votos a favor, 15 en contra y 1 en blanco). La medida viene motivada por una solicitud del Ayuntamiento de Calahorra para potenciar esta balsa de riego como recurso turístico a través de su utilización para la práctica de deportes acuáticos. Eso sí, «siempre se priorizará el servicio de regadío para los usuarios», remarca el presidente de la comunidad de regantes, Miguel Legarre, cuya junta de gobierno fue autorizada en la citada asamblea para «negociar ahora con el Ayuntamiento un convenio con los condicionantes técnicos y económicos» de cara al aprovechamiento del agua con fines lúdicos.

De esta manera, el embalse, construido en 1885 y con una lámina de agua de 20 hectáreas de superficie, podrá compatibilizar el riego con la práctica de deportes acuáticos como la natación o el windsurf. De hecho, el Club Winsurfista de La Rioja venía reclamando este uso después de que en el año 2020 los regantes prohibieran explícitamente su uso para fines que no fueran los del riego, impidiéndoles practicar este deporte como habían venido realizando.

«Siempre se priorizará el servicio de regadío para los usuarios»

Miguel Legarre

Comunidad de Regantes

«Será un potencial turístico. Hay mucha afición a los deportes acuáticos»

Mónica Arceiz

Alcaldesa de Calahorra

«Estoy ilusionado con la posibilidad de volver a navegar en Calahorra»

Javier Argaiz

Club Windsurfista

«Será un potencial turístico importante porque hay mucha afición a los deportes acuáticos y en esta zona no hay espacios así», destaca la alcaldesa de Calahorra, Mónica Arceiz. No obstante, incide en que «el uso prioritario será el riego». «Cuando el agua baje a cierto nivel no se podrá utilizar», advierte a la vez que avanza que de acuerdo a las valoraciones de los «técnicos» la idea inicial es «utilizar una franja en medio» de la lámina de agua.

Javier Argaiz, del Club Windsurfistas de La Rioja y quien compite en torneos en la modalidad de kitesurf, se muestra «ilusionado con la posibilidad de volver a navegar en Calahorra». Y además, apunta que se podrá practicar abiertamente ya que «antes de que se prohibiera, quienes íbamos a navegar lo hacíamos con un 'perfil bajo', porque aunque no estaba autorizado, tampoco desautorizado».

Menos gastos para los regantes y un plan contra especies invasoras

El convenio que firmen el Ayuntamiento de Calahorra y la Comunidad General de Regadíos de la ciudad para el uso recreativo del agua del Perdiguero, cuyas cláusulas se tienen que concretar, «es positivo para las dos partes», señaló el presidente de la entidad de riego, Miguel Legarre. Y es que se trata de una iniciativa «buena para Calahorra como para los regantes, que tienen una infraestructura a la que se le puede sacar rédito, aparte del regadío, y que puede ayudar a que los gastos de los regantes sean menores». Por su parte, la alcaldesa, Mónica Arceiz, expresó su «agradecimiento» a la comunidad de regadíos por «haber sido empáticos y haber visto que se le puede sacar más partido al pantano, siempre salvaguardando su derecho al riego».

«Aunque no tiene por qué suceder» –precisa Miguel Legarre–, uno de los riesgos a los que puede tener que enfrentarse el embalse por la entrada de embarcaciones es la introducción de especies invasoras, como el mejillón cebra, lo que podría ocasionar afecciones a la infraestructura y mecanismos hidráulicos. Esta posibilidad también se contempla de cara al convenio. «Primero hay que ver dónde estamos (si existe ya algún caso de mejillón) y a partir de ahí establecer un plan preventivo y hacer un seguimiento», explicó Legarre, que precisó que para ello se contará con una «empresa especializada». «En el caso de que se detecte algún problema se tomarán medidas correctivas», añadió.