Borrar
César Quintanilla y María Cruz Jiménez, vecinos de la calle Pedro Lepe, delante de sus casas. I.Á.
La calle Pedro Lepe se sube al tren de la intermodal
Calahorra

La calle Pedro Lepe se sube al tren de la intermodal

El proyecto de la nueva estación incluye urbanizar esta vía, aunque sus vecinos son contrarios al paso de vehículos

Isabel Álvarez

Calahorra

Viernes, 7 de octubre 2022, 02:00

Que Pedro Lepe fue uno de los obispos destacados de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño entre los siglos XVII y XVIII (de 1686 a 1700) es de sobra conocido. Sin embargo, lo que seguramente muchos desconocen en Calahorra es que su nombre aparece en la placa de una calle. De todos modos, no es algo que pueda extrañar. Esta vía, junto a la estación del ferrocarril, permanece casi oculta detrás de un viejo vallado de madera, rodeado en parte por una especie de maraña de vegetación.

El tramo de entrada a la calle, por la avenida de la Estación, es –literalmente– un estrecho camino poblado de hierbajos que termina con una hilera de cuatro viviendas, de las que una se encuentra actualmente deshabitada.

En esta parte sí que existe un pavimento rudimentario, que los pocos vecinos que residen en los tres inmuebles habitados utilizan para guardar enseres de lo más variopinto. Desde triciclos infantiles, muebles y material de obra hasta una bicicleta estática estropeada.

«Me parece perfecto que mejoren toda la calle, pero no deberían dejar pasar el tráfico por nuestro tramo», opina una vecino

Pero la calle Pedro Lepe no tardará mucho tiempo en mejorar sus condiciones al haberse 'subido al tren' del proyecto de construcción de la nueva estación intermodal de Calahorra, que supone una oportunidad de regeneración a través de su urbanización y la de su entorno.

«A ver si pronto tiran todo», dice María Cruz Jiménez, quien se trasladó hace 18 años a una de estas viviendas junto a su hermano, ya difunto, y su cuñada. «Vivía en la calle Cabezo y al principio me costó venirme aquí» –confiesa– mientras señala el mal estado de la vegetación y la basura que campa en un terreno de la estación separado de su casa por la valla de madera.

«Ese empalizado lo hizo originalmente Renfe porque por aquí pasaba un tren de carga», explica César Quintanilla, otro de los vecinos. Él llegó a Calahorra desde Argentina y compró una de las casas de la calle, en la que ahora reside con su hijo. «Esto parece un basurero. Han tirado maderas, basura... Nosotros estuvimos manteniéndolo durante un tiempo, pero al final te terminas cansando», lamenta para censurar que desde Renfe no se haya insistido en la limpieza de esta zona, que «es lo que ve la gente cuando llega a Calahorra».

Pero no es esta la única peculiaridad de la calle. «Si es que siempre hemos estado en tierra de nadie», dice César. Y es que, según este propietario, el tramo de la calle en el que se encuentran las viviendas, de unos 50 metros, «figura en las escrituras como nuestro». «A cada casa le corresponden estos tres metros de ancho y por eso la calle es de uso privado», sostiene.

El proyecto de urbanización para toda la zona, pendiente de aprobar, es recibido en principio con aceptación por parte de los vecinos, aunque con un 'pero'. La actuación planteada contempla un área de tráfico mixto tanto para peatones como para vehículos ligeros en esta calle. César sin embargo muestra su desacuerdo: «Me parece perfecto que mejoren toda la calle, pero creo que, como estaba en el primer proyecto, no deberían dejar pasar el tráfico por nuestro tramo porque vamos a tener los coches nada más salir por la puerta de casa», opina este vecino.

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja La calle Pedro Lepe se sube al tren de la intermodal