La avalancha de clientes en el estreno de Lild obliga a Policía de Calahorra a regular el tráfico

Con una plantilla de 28 personas, Lidl casi se quedó pequeño en el estreno de su nueva ubicación. Desde primera hora de la mañana el aparcamiento del supermercado, con un centenar de plazas, no era capaz de acoger a todos los vehículos que entraban al recinto. De hecho, fue necesario que agentes de la Policía Local regulasen el tráfico, dado que se estaban produciendo filas y atascos en la zona de acceso a la tienda y que además se encuentra en una de las entradas a Calahorra.

El nuevo espacio comercial de Lidl en Calahorra ofrece, como explica la cadena en una nota de prensa, «una gran variedad de productos frescos (fruta y verdura, carne y pescado, pan y bollería recién horneada…) y de nevera, secos envasados, bebidas, cosmética, higiene personal, limpieza y artículos de bazar». Lild destaca también una mayor apuesta por el producto riojano con «cada vez más referencias regionales». Entre ellas, cita «múltiples variedades de vinos, embutidos o frutas y hortalizas». La sostenibilidad es otra de sus apuestas. En este sentido, señala la implantación de varias medidas de eficiencia energética, como «puntos de recarga para vehículos eléctricos, más de 520 metros cuadrados de paneles fotovoltaicos, iluminación LED o cristales con baja transmisibilidad de calor».

El nuevo punto de venta de Lidl en Calahorra reafirma además su apuesta por seguir creciendo en La Rioja, en donde ya cuenta con una red de cuatro tiendas, emplea a más de 80 personas y compra producto por valor de unos 90 millones de euros anuales a 20 proveedores riojanos.