Nájera

En busca de nuevas voces

Veintisiete voces se juntan cada martes, durante dos horas, en la sala de ensayo del Monasterio de Santa María la Real de Nájera. Veintisiete voces, unas con más experiencia que otras, pero que juntas crean un canto casi hipnótico que no se puede dejar de escuchar. Estas son las voces de las mujeres y hombres que forman la Coral Najerense, que espera con ilusión la llegada de nuevas voces que se unan a su familia.

Una familia que este mes de junio está de celebración, pues cumple 78 años. Algunos de sus miembros se han incorporado hace poco, como Jesús, Alberto o Víctor (que a pesar de ser una de las voces más jóvenes, será el solista masculino en la próxima actuación). También está María (solista), que entró en el coro «con 10 años, por mi abuela que cantaba aquí», por lo que lleva desde bien pequeña, y siendo treintañera ahora aún continúa, pues es algo que tiene como «una tradición familiar».

Aunque María es una de las que lleva casi toda la vida en la coral, hay otros miembros que le ganan en años formando parte de esta familia. Javier es uno de ellos, que recuerda que comenzó con unos 19 años y tiene ahora 65.

Desde el año 2020, el director de este grupo es Héctor Rubio, que confiesa que aunque al principio creía que no le iba a gustar esto del canto coral, la experiencia «está siendo maravillosa y fascinante». Además de Héctor, por la coral han pasado otros directores, pero quizá el más querido por todos sea el padre Lucas Uranga, que lo dirigió durante casi cuarenta años. Como rememoran varios miembros, «Lucas formaba parte de la orden de los franciscanos, y se fue cuando estos dejaron el monasterio», en 2017. El cariño por el antiguo director sigue siendo muy grande, y de hecho, hace unos años, unos cuantos le visitaron para cantarle por su 77 cumpleaños.

Para Héctor, María, Javier y el resto de los 27 miembros de la Coral Najerense, que este grupo cumpla 78 años es «todo un orgullo», y aunque estos últimos años han sido algo más complicados por «la falta de apoyo económico del Ayuntamiento», esperan que la situación mejore. «Este ha sido un coro muy apoyado en Nájera, se nos ha querido mucho», destacan varios de sus miembros.

Además del coro de adultos, también está, desde el año pasado, el coro infantil, este con más problemas para encontrar nuevos miembros. A día de hoy cuenta con nueve niños, pero «no todos vienen siempre a ensayar», explica Héctor, y «es complicado mantener el ritmo». Por eso, de cara al año que viene, se ha pensado en establecer un mínimo de doce participantes para sacar adelante el grupo. Así que todos los jóvenes najerinos que quieran unirse serán más que bienvenidos.

La pequeña gran familia de la Coral Najerense espera seguir cumpliendo años, y para ello necesita que nuevas voces se animen y se unan a sus coros o, al menos, «vengan a probar a uno de los ensayos» para, si les gusta, pasar a formar parte de esta familia que, seguro, les acogerá con los brazos abiertos.