«Queremos enganchar a los de Andosilla en el sentimiento del Robo»

–Solo celebrarlas es un éxito.

– Si de normal es compleja su coordinación, confeccionarlas con la incertidumbre previa de la pandemia ha sido complicado. Pero las hemos disfrutado, ha salido todo fenomenal, la participación en todos los actos ha sido buenísima y se ha respirado un gran ambiente y buen rollo. La gente tenía ganas. Han sido días de alegría totalmente compartida. Y también emocionantes al poder celebrar al fin la declaración como fiestas de interés turístico nacional y recibir de nuevo a nuestros hermanos navarros.

– Ya con ese título, ¿qué planean para el futuro de la tradición?

– Hemos hablado con los pregoneros y el alcalde de Andosilla para realizar algún tipo de hermanamiento que dé a conocer a la población de la localidad navarra toda la tradición, para enganchar a las nuevas generaciones en los Auroros y en el sentimiento del Robo.

– También fue especial la bomba con el '¡Viva Arnedo!' a cuatro voces.

– Fue muy especial, precedido por el 'Himno a los santos' que nos puso los pelos de punta a todos. La emoción fue incontenible entre los que estábamos en el balcón del Ayuntamiento.

– Ese primer momento queda empañado por la harina.

– Duele que en Arnedo no se dé lo que vemos en otras localidades, la armonía de distintas edades compartiendo el mismo espacio en ese momento tan emotivo. Organizamos un dispositivo con Protección Civil, Guardia Civil y Policía Local para intentar confiscar la harina, pero es complicado controlar tantas calles. Llamamos a las nuevas generaciones porque no tiene sentido celebrarlo así y que tomen ejemplo de lo que ven en chupinazos de otras ciudades vecinas. Seguiremos educando, también por el gran gasto en agua que no debemos desperdiciar y en personal para limpiar la plaza.

–Después vinieron días frescos. ¿Se quedaron justos con los huevos a las Clarisas?

– Las agasajamos bastante, también con buenas cestas preparadas por los representantes de la Juventud. Es lo que nos toca en estas fechas del año. Siempre estamos rezando para que llegue el veranillo de San Miguel. Pero se han notado pues esperábamos un pronóstico peor y, finalmente, la meteorología ha sido mejor y ha respetado bastante. No se ha tenido que suspender nada, salvo estar mirando al cielo y algún cambio de ubicación.

–¿Qué le diría a 'la Sandra' que se quedó sin fiestas en 2020 y 2021?

– Que esté tranquila, que todo llegaba. Fueron momentos muy complicados. Te ofrecen la oportunidad de llevar esta concejalía tan bonita, la niña bonita del Ayuntamiento, quieres hacer cosas y luego vino ese palo... fue duro no poder celebrarlas. Ahora, es muy emocionante retomar las fiestas. Hacer feliz a tanta gente es tan gratificante...