Primeros pasos entre sonrisas

La plaza Nuestra Señora de Vico fue ayer un encuentro de sonrisas. Al dejar las mochilas en el camión. Al reunirse con amigos de toda la vida o de los que han aparecido a lo largo del camino. Al saludar a tantos familiares y vecinos congregados para una despedida para nada triste, sino llena de esperanza e ilusión. Era el momento de la partida de la XXXV Valvanerada Scout, de sus 110 andantes y del más de medio centenar de miembros y colaboradores de los grupos de apoyo del grupo scout Vallaroso que permiten su organización y disfrute.

La plaza Nuestra Señora de Vico era el lugar de encuentro a media tarde, donde dejar las mochilas en el camión, encontrarse con el resto de participantes y emprender la marcha. Pero antes de dar los pasos de la primera etapa en otra soleada jornada, tocaba despedirse de la patrona arnedana, la Virgen de Vico, para tomar sus saludos y llevarlos hasta el monasterio de Valvanera.

Y como tantas otras situaciones a lo largo de este año en la ciudad del calzado, la celebración de la exposición La Rioja Tierra Abierta, varió el guión habitual también de la Valvanerada Scout. Así, en lugar de llegar los andantes a la iglesia parroquial de San Cosme y San Damián -cerrada por ser sede de la muestra 'Cinemática'-, se acercaron a la de Santo Tomás para recibir los saludos de la Virgen de Vico y cantarle su himno a una sola voz.

De regreso a la céntrica plaza, animada por la pareja rumbera de los míticos Gary Gary, el grupo se reunió para cortar la cinta con representantes municipales e iniciar la trigésimo quinta Valvanerada Scout, cuatro jornadas de marcha, de convivencia y de contacto con la naturaleza. En esos primeros pasos, los andantes tuvieron el apoyo, aplauso y saludos de cientos de arnedanos que se acercaron para darles la despedida. En todos, un mismo deseo scout: "¡Buena senda!".

Esos primeros pasos les llevaron el atardecer de ayer, en la única etapa nocturna, hasta Munilla. Desde ahí, esta mañana partirán hacia Laguna de Cameras, donde les espera en la llegada una fiesta de disfraces de indios y vaqueros que animará el ambiente y la convivencia. En la tercera jornada, aprovechando el puente, Ortigosa de Cameros será el destino, con talleres, juegos y sorpresas por el 35 aniversario a la hora del descanso. Y ya el sábado llegará la jornada más emocionante, la del objetivo cumplido, la de la llegada al monasterio de Valvanera a primera hora de la tarde. Allí, sonrisas de familiares y amigos desplazados al monasterio les recibirán con emoción.