La ordenanza de arbolado urbano pide a las promociones un proyecto de gestión

Más de 700 árboles comparten calles y día a día con los arnedanos y superan el millar los del parque del Cidacos. Con el objetivo de poner sobre el papel criterios para su gestión y protección, el pleno del Ayuntamiento aprobó anoche una ordenanza sobre el arbolado urbano del municipio.

En el punto principal del orden del día de la sesión ordinaria del pleno de la Corporación correspondiente a los dos últimos meses, la edil de Medio Ambiente, Violeta González, defendió la necesidad de «proteger con un criterio el patrimonio arbolado de la ciudad y también atender las molestias y perjuicios que puede ocasionar al vecino».

Acudiendo a ordenanzas de ciudades como Vitoria, Valencia o Madrid y con la asesoría del aparejador municipal, el responsable de la brigada de Parques y Jardines, Carmelo Pérez-Aradros, ha encabezado la redacción de esta ordenanza que, «como herramienta», contempla en sus títulos normas básicas de gestión del arbolado, para su protección y un régimen sancionador.

Entre ellas, una novedad es la obligación que tendrán las empresas constructoras de presentar un proyecto de urbanización que incluya vías arboladas para justificar qué tipo de árboles se plantan y sus tamaños, dónde, a qué distancia de las viviendas o los espacios a contemplar en las aceras, para evitar problemas futuros de convivencia.