La obra de Planarresano de Arnedo deja a algunas naves por debajo de la calzada

El avance de la reforma de la zona industrial de Planarresano, en especial con la construcción de las aceras y el carril bici, está dejando una preocupación y un malestar entre las empresas del entorno, como ha podido constatar este periódico. La urbanización de una zona que creció en décadas pasadas sin orden conlleva a que muchas empresas, sobre todo en su margen derecho, queden a un nivel inferior al de la calzada que próximamente se pavimentará y a las aceras en construcción. «Nos han puesto un muro», señalaba un empresario a Diario LA RIOJA.

Redactado, contratado y financiado al cien por cien por el Gobierno de La Rioja, su propósito con este proyecto es poner orden y urbanizar una zona en la que, sin la calificación de polígono, fueron instalándose empresas a ambos márgenes de la carretera regional LR-382, la antigua de Préjano. Al momento de mejorar el entorno, el proyecto contempla accesos ordenados a las empresas y aceras, además del primer carril bici de la ciudad.

«Al construir las aceras y asfaltar, varias naves quedan por debajo de la calzada», reconoce el alcalde arnedano, Javier García. Ejerciendo el Ayuntamiento como interlocutor entre las empresas arnedanas y la Dirección General de Infraestructuras del Gobierno de La Rioja, García anunció que hoy mantendrán una nueva reunión para abordar la situación de la obra. «Hay un diálogo continuo, pero unas cuestiones se pueden resolver y otras no: el del desnivel es un problema de difícil solución porque las naves no se construyeron en su momento a la altura de la calzada», expone el alcalde, quien confía en que, el resultado final de la obra deje satisfechas a todas las partes.

El Partido Popular llevó también esta preocupación al último pleno de la Corporación, señalando su portavoz Toño Eguizábal el gasto añadido que va a ocasionar a las empresas nivelar los espacios que quedan entre la acera y sus naves, además del riesgo de inundación si se da una tormenta fuerte. El grupo de Gobierno recuerda que esos espacios son zonas privadas en las que han de intervenir las empresas como propietarias del terreno para ordenar la zona.