Decenas de vecinos acudieron el domingo por la tarde a coger flores de la Virgen para enfermos y difuntos. P. A.
Arnedo

La novena de Vico de Arndo recoge una tonelada de leche para Cáritas

La parroquia hizo llamada ante el descenso en los almacenes del producto debido al incremento de precios

Miércoles, 11 de septiembre 2024, 08:38

Ante la celebración de la novena por la patrona arnedana, la Virgen de Vico, la parroquia llamó a los fieles de la ciudad del calzado a acompañar la tradicional ofrenda floral con otra de solidaridad. Les pidió que acudieran a las eucaristías de las novenas ... portando leche para donar. Finalizadas las celebraciones este domingo con la multitudinaria misa y procesión por la patrona, la parroquia ha recogido una cantidad redonda, una tonelada de leche.

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Como en tantos colectivos, y también hogares, el incremento de los precios ha repercutido a la baja en la recepción de determinados productos en los almacenes de Cáritas Parroquial, en las dependencias del Centro Social Eliseo Lerena. En especial, de aceite y de leche, dos productos básicos en la cocina de cualquier familia. Por ello, la entidad social y la parroquia pidieron días atrás que los fieles hicieran un esfuerzo para engordar las estanterías que guardan la leche para el reparto.

Desde el primer día de novena, las capillas y las escaleras de la torre de la iglesia de Santo Tomás fueron recibiendo diversos envases de leche. Entre el 31 de agosto y el domingo 8 de septiembre, los arnedanos acudieron con botellas, tetra briks... Vista esa respuesta, el párroco Javier Martín ha agradecido la solidaridad de los vecinos para reunir esa cantidad que destinará a Cáritas Arnedo «para que la reparta entre los más necesitados».

Tras la misa y procesión, los arnedanos cogieron flores de la ofrenda para llevarlas a vecinos enfermos o a difuntos

Junto a esta solidaridad, Martín destaca otro gesto que se está afianzando como costumbre entre los arnedanos alrededor de su patrona. Después de la misa y procesión en su honor en el mediodía del 8 de septiembre, la iglesia de San Cosme y San Damián permaneció abierta por la tarde como una invitación para que quien quisiera acudiera para recoger unas flores de la ofrenda realizada durante la novena para llevarlas después a enfermos –tanto en hogares como en el Hospital de Calahorra– y difuntos.

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