El Cervantes de Arnedo reduce su aforo de 472 a 135 para cine y 127 para teatro

Después de siete meses, el Teatro Cervantes volverá el jueves 29 de octubre a abrir sus puertas a la cultura. Y lo hará con la adaptación de sus instalaciones a un protocolo frente al COVID-19 que busca cuidar y proteger tanto a los espectadores como a los profesionales que trabajan en él o se suban a su escenario, como señala la edil de Cultura, Chus Zapata.

En este tiempo de pandemia, el área de Cultura del Ayuntamiento ha reducido el aforo de sus coloridas butacas para garantizar la distancia: de las 472 que cuenta, habilitará 135 para las sesiones de cine y 127 para las de teatro, eliminando la primera fila para dar espacio respecto al escenario. En la disposición, una butaca se ocupará por cada tres vacías, alternando el público entre ellas por fila.

«Vamos a empezar con cine de la mano de Octubre Corto, que es la actividad con más seguridad al no haber interactuación entre las personas. Pero en la medida de nuestras posibilidades y de la evolución de la situación sanitaria, intentaremos organizar otras actividades», explica Zapata.

Ante cada sesión o función, el personal del Cervantes abrirá sus puertas 45 minutos antes para facilitar el acceso escalonado del público a la sala y su distancia interpersonal. Con el uso obligado de mascarilla, el personal evitará las aglomeraciones y tomará registro de los asistentes, que deberán llevar la mascarilla durante todo el tiempo. Para ello, las localidades serán numeradas y preasignadas, con asientos nominativos para los que el comprador debe dar nombre, apellido y teléfono para facilitar el rastreo.

El Cervantes contará con dispositivos de gel hidroalcohólico en su acceso, en la sala y en los baños y la señalización y carteles informativos para indicar el recorrido de entrada y salida para evitar que se crucen personas: el público entrará por el acceso habitual por la escalera a mano derecha y saldrá por la otra puerta de la sala, en su margen izquierdo. La salida se realizará de forma escalonada, primero el patio de butacas y después la tribuna.