Ernesto Pascual
Martes, 28 de marzo 2017, 10:07
«Los vecinos de la peña ya pueden dormir tranquilos. Y nosotros también». Es la aliviadora frase con la que el alcalde arnedano, Javier García, anuncia la conclusión de los trabajos de estabilización de la ladera norte de la peña, que custodia las espaldas de buena parte del casco urbano de la ciudad del calzado.
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Con la malla de triple torsión abrazando ya los 230 metros de peña que hay entre las calles Santa Marina y San Miguel, con Carrera como eje, la junta de gobierno local del Ayuntamiento arnedano aprobó en su sesión de este jueves la recepción de las obras de estabilización de esta zona.
Con un presupuesto de ejecución de este proyecto por 191.000 euros (más IVA) y tres meses de plazo, la previsión de la empresa adjudicataria, Geotalud, era culminar los trabajos a finales de este mes de marzo. «Las obras han adelantado su finalización una semana respecto a la previsión, con lo que debemos mostrar nuestra satisfacción con la empresa», expresa García.
Los trabajos han consistido en el cosido allá donde se encontraba rota o la colocación donde no existía de malla de triple torsión reforzada con la que frenar el riesgo de desprendimiento de rocas de la peña de arenisca sobre las casas y corrales que descansan a sus pies. «Era una deuda histórica con los vecinos de esa zona», asiente el primer edil.
Vía convenio de colaboración, las obras las han financiado al 60% el Ayuntamiento de Arnedo y la Consejería de Fomento del Gobierno de La Rioja al 40%.
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