Un almuerzo de peñistas que cumple 50 años

Resulta casi imposible no pensar en sus embutidos cuando alguien habla de Baños de Río Tobía. Y no es para menos, pues la fama precede a esta localidad en la que, se mire donde se mire, se puede apreciar el orgullo y el cariño que los bañejos tienen por sus productos estrella, algo que traspasa fronteras y se reconoce no solo en nuestra región, sino también a nivel nacional e internacional.

Mañana se cumplen cincuenta años de una de las fiestas más populares de Baños, y que como no podía ser de otra forma, está relacionada con esos productos: el Festival del Chorizo. «No muchos festivales logran llegar a esta edad», presume con orgullo Pepe Martínez, uno de los organizadores y representante de las empresas participantes en este día.

Esta tradición nació el 22 de septiembre del año 1974 de la mano de la antigua Peña Los Claveles, que celebró un almuerzo con motivo de las fiestas de San Mateo y la Virgen de los Parrales, que tuvo lugar tras la misa y procesión de ese día. Como narra Pepe Martínez, al año siguiente «se pasó al fin de semana de antes de las fiestas de San Mateo» para que no coincidieran, y así se marcó el inicio de una tradición que, por el momento, celebra ya sus bodas de oro.

Algo que a muchos les causa curiosidad es el porqué de que los chorizos que se reparten sean siempre escaldados, y no se preparen de otra forma. Los bañejos lo tienen muy claro, pues es precisamente un homenaje a los trabajadores de las antiguas fábricas de embutidos de la localidad. «Cuando se hacían antiguamente las matanzas en Baños, donde hay fábricas desde el año 1900, los trabajadores preparaban agua para escaldar a los cerdos, y antes de usarla para ese fin, metían unos chorizos para el almuerzo», detalla Pepe, que no puede ocultar el orgullo al hablar del Festival del Chorizo.

Este orgullo es algo que se comparte entre todos los vecinos de Baños, donde a día de hoy se cuenta con nueve fábricas de embutidos y jamones que son el motor económico del pueblo. Como recalca Pepe, este festival sirve también de homenaje «a todos los trabajadores que están y que han pasado por las fábricas».

Más de doscientas personas se ocuparán de que mañana no le falte a nadie su ración de pan con chorizo y que puedan disfrutar como nunca de este festival que «cada año tiene algo especial». Pepe Martínez invita a que todo el mundo acuda mañana a Baños a «probar nuestro producto, que es de calidad excepcional, y a disfrutar de un día de fiesta grande». A partir del mediodía, miles de personas podrán volver a degustar esos bocadillos de chorizo escaldado que servirán de homenaje a esos antiguos trabajadores bañejos y a aquel almuerzo que hace cincuenta años celebró la Peña Los Claveles.

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