El rebosadero muestra sus fugas

Después de sacarlo a concurso por segunda vez, y con dos empresas aspirantes, la alfareña Construcciones Alberto Varea resultó adjudicataria del encargo conjunto para redactar el proyecto y ejecutar las obras de reparación del rebosadero de la piscina por una cuantía de 91.173,50 euros (IVA incluido). Con un plazo de garantía de la obra de 2 años, este precio suponía una rebaja respecto a los 108.200 euros del presupuesto de licitación del que partió el Consistorio.

Con la obra ya avanzada repasando cada punto del rebosadero, y aunque siempre con la reserva de esperar a su final, el Ayuntamiento es optimista sobre sus resultados. «Hemos dado prioridad a que la obra continúe por lo que pueda pasar de cara al verano –explica la edil de Deportes, Juventud y Festejos, Raquel Pedraja–. Los que ejecutan la obra, que va bien avanzada, creen que han encontrado a la primera dónde se encontraba el problema».

Por estas primeras indicaciones, el origen de las fugas radicaría en un problema en una de las juntas del rebosadero. «Se ve que la parte superior del rebosadero tenía filtraciones en algún punto. Encontraron una zona parecida a una esponja, que iba absorbiendo el agua», describe Pedraja valorando el ahorro económico y ambiental que supondría.

Tras estos trabajos, la piscina se llenará a media capacidad para evitar que sufra daños y su dilatación.