El ingeniero agrícola Javier Achútegui expuso su experiencia con un pistachero en Arnedo. Ernesto Pascual
ALFARO

«El pistacho crece en cualquier suelo y complementa al cultivo principal»

Javier Achútegui | Ingeniero agrícola ·

Las XXXV Jornadas de Fruticultura de Alfaro abordaron ayer la experiencia del pistachero, que cuenta con seis hectáreas en Arnedo

Sábado, 4 de diciembre 2021, 01:00

Buscando cultivos alternativos ante tiempos de crisis, Javier Achútegui encontró en Ciudad Real y Toledo la opción del pistacho. «Si se parece al almendro y en esta zona los hay, ¿por qué no probar con el pistachero?», se cuestionó. Desde 2016, cuenta en Arnedo con 6 hectáreas dedicadas a este cultivo, que ayer protagonizó la primera y más singular conferencia de las cuatro que conformaron las XXXV Jornadas de Fruticultura de Alfaro.

Publicidad

– ¿Es posible el cultivo del pistachero en La Rioja?

– Al comprobar el incremento del gradiente en esta zona, en la que aumentan las temperaturas y vamos hacia un clima más mediterráneo, entiendo que el cultivo es viable. Es versátil a cualquier tipo de suelo y puede ser un cultivo complementario al principal de la economía del agricultor en tierras más marginales. Eso sí, excepto en zonas de ribera de río o arcillosas.

«Es un cultivo que requiere paciencia pues entra en producción lenta, a los seis o nueve años de plantar. Es caro al principio»

– ¿Por qué habría que barajar plantar pistachero?

– Por esa adaptabilidad a gran cantidad de suelos; porque es un cultivo altamente mecanizable que permite reducir costes, como en la poda; se puede adaptar a una agricultura a tiempo parcial y es una alternativa interesante de inversión para complementar otros cultivos; por su elevada longevidad; por su rendimiento económico elevado; por la alta demanda que hay en el mercado, en especial del pistacho ecológico, llegando haber más demanda que oferta; y por ser un producto relacionado con la dieta saludable.

– ¿Qué debe tener en cuenta quien quiera apostar?

– Lo primero, saber que es un cultivo que requiere paciencia, pues entra en producción lenta, a los 6 o 9 años de plantar. Es una inversión cara en un principio y que ha de ser a medio-largo plazo, pero tiene un retorno largo. Dado lo costoso que es, antes de plantar hay que tener en cuenta que el lugar elegido cumpla las condiciones climatológicas, como acumular más de 700 horas de frío, atención a heladas tardías...

– ¿Cómo es su experiencia?

– Desde 2016 tengo seis hectáreas dedicadas al pistacho en Arnedo, una de ellas como campo demostrativo. En el sexto año, con el árbol ya formado, ya tenemos los primeros frutos: son de calibre grueso y el 88% están abiertos. La producción irá 'in crescendo', pero intuimos que algo bueno va a haber.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta especial!

Publicidad