El sacerdote Carlos Esteban Hernando observa el armario en el que las parroquias han reunido su archivo histórico. Ernesto Pascual
ALFARO

Las parroquias alfareñas reúnen todos sus archivos, que se remontan a libros de 1507

El propósito es aportar un espacio que los proteja y buscar ayudas que insten a su estudio, catalogación y digitalización

Domingo, 5 de diciembre 2021, 01:00

De bella encuadernación y serpenteante grafía, la que arrastra con orgullo y entereza el paso silencioso del tiempo, el primer libro que guarda el magno armario es el de 'Bautizados desde 1507 a 1539'. Por sus páginas pasan los nombres y apellidos de los antepasados de los alfareños de hoy. Junto al primero, reposan los bautizados en las décadas siguientes. En los siglos posteriores. Y también los libros de 'Desposados', de 'Defunciones', misales...

Publicidad

La unificación plasmada hace unos años de las dos parroquias de Alfaro ha dado lugar, entre otros pasos, a agrupar también los archivos de ambos templos, de San Miguel, tanto del viejo como del nuevo, y de la iglesia del Burgo. Esos volúmenes son otro tesoro que guarda la colegiata alfareña, el monumento nacional declarado en 1976, junto al arte religioso, su baldaquino, su coro y, también, la colonia de cigüeñas que la distingue.

  • Contenido La reunión de los archivos de San Miguel –el viejo y el nuevo– y de la iglesia parroquial del Burgo.

  • Ejemplos Reúne libros de bautizados, desposados y defunciones desde 1507, misales de varios siglos, las partituras musicales que sonaban en San Miguel, libros de fábrica sobre obras y otros costes asumidos y pergaminos manuscritos.

  • Objetivo Su protección en una sala de la colegiata y ponerlos a disposición de futuros estudios e investigaciones.

«Recogen datos bonitos para Alfaro que hay que cuidar y cultivar y que, incluso, podrían formar parte del museo en el templo si sale adelante el proyecto turístico que hemos planteado para la colegiata de San Miguel», expone el sacerdote Carlos Esteban Hernando.

El primer libro es el de 'Bautizados desde 1507 a 1539', viajando el resto por 'Desposados', 'Defunciones', misales...

Esta medida de reunirlos en un mismo espacio busca tanto proteger los documentos en armarios adecuados como abrirlos al turista o al estudio de investigadores interesados en dedicar tiempo en profundizar en medio milenio de vida de las dos parroquias. Al abrir sus puertas al tiempo, recogen tanto la vida y muerte de miles de alfareños como decenas de partituras del archivo musical de San Miguel, tomos con misales de siglos pasados, libros de fábrica sobre los distintos gastos que tuvieron que acometer las parroquias a lo largo de los tiempos... También pergaminos manuscritos de enorme belleza con coloridos dibujos. «Podemos mostrarlos en vitrinas pues tienen su valor», indica Esteban.

Por el momento, en el local acondicionado para uso parroquial en la torre derecha de la colegiata, una de las integrantes del grupo parroquial de voluntarios da pasos en la organización y digitalización del archivo, desde el más reciente. El propósito, poder buscar cada tema de forma más rápida y funcional, también en línea. Para el histórico, queda el anhelo de ordenarlo y digitalizarlo para poder acceder a su consulta. Para ello, la parroquia baraja diversas opciones para contratar encargados: «Si hay interés político y cultural, podríamos acogernos a algún programa de empleo para contar con investigadores o documentalistas», expone Esteban. Sería otra manera de seguir escribiendo y haciendo la historia de Alfaro.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta especial!

Publicidad