Pedaladas primaverales en familia

La primavera invita a salir. Y unida a la bicicleta, los parajes naturales del término municipal alfareño se convierten en una deliciosa e irresistible tentación. En su labor de fomentar el deporte y el uso del vehículo de dos ruedas, unida a su objetivo de promocionar su localidad, el Club Ciclista Gracus celebró en la soleada mañana dominical de ayer la séptima edición del Día de la Bicicleta.

Con la colaboración del Ayuntamiento, la Policía Local, Cruz Roja y Protección Civil, además de un buen puñado de empresas, el ambiente de la jornada fue festivo antes de las primeras pedaladas. La cita era a las 11 de la mañana en la plaza de España, bajo la silueta de la Colegiata de San Miguel. Media hora antes, la música y los hinchables ya invitaban a acercarse a los más perezosos. Porque el espíritu familiar de esta marcha no competitiva y sí de convivencia -otra de sus máximas- quedó plasmado desde el principio.

A los pies de la Lonja de San Miguel se dio la salida. Como en tantas otras marchas o carreras, el primero en dar la pedalada fue el veterano ciclista José Jiménez 'el Chiquiñuela'. Detrás de él un colorido y animado pelotón formado por más de un centenar de personas. Entre ellos, muchos padres con sus hijos, compartiendo con bicicletas de diversos tamaños y soportes una afición saludable. Y segura. Porque la organización insistió en la obligatoriedad para todos los participantes de usar el casco durante todo el trazado.

Después del primer tramo urbano, los ciclistas se adentraron en la Reserva Natural de los Sotos del Ebro. Y no todo fue pedalear. Aprovecharon para realizar paradas para disfrutar del estallido de color y vida de sus parajes en este inicio primaveral. De regreso al centro urbano, el buen ánimo continuó con los hinchables y con una degustación de tortilla de patata para reponer fuerzas y poder seguir disfrutando.