Adiós a la vieja posada de Grávalos

Anteayer miércoles se llevó a cabo el derribo del edificio de la antigua posada de Grávalos. Su mal estado y el peligro que suponía para las viviendas contiguas ha conllevado que la propietaria tomase esta medida para evitar males mayores. Se ha conservado parte de la fachada de la planta baja con un arco de medio punto, tal y como ha obligado Patrimonio de La Rioja.

El inmueble, particular y de uso residencial, estaba deshabitado desde hace varias décadas, cuando su dueña se marchó de la localidad. Las puertas de acceso se encontraban tapiadas y la fachada y tejado muy deteriorados. «La posada: Plaza Principal nº 16: casa de tres plantas, la inferior de mampostería con portada y medio punto en sillería y las altas de adobes con reja del siglo XVII». Así se describe en la página web del Ayuntamiento esta antigua construcción.

Lo que en tiempos fue una posada se encuentra catalogada por el Plan General Municipal como ejemplo de arquitectura tradicional de Grávalos. Dicha consideración no establece grados de protección pero obliga a que cualquier intervención cuente con el informe favorable del Consejo de Patrimonio Artístico de La Rioja con el fin de conservar las principales características tipológicas y ambientales de los cascos históricos y lo más destacado de su arquitectura.

En este caso el Consistorio tramitó su demolición por su situación de 'ruina inminente'. El Consejo de Patrimonio emitió un informe en el que daba el visto bueno al proyecto privado de derribo que contemplaba la conservación en su lugar actual de elementos fundamentales como son la fachada de piedra de la planta baja con arco de medio punto. Además, si la propiedad quisiera construir un nuevo edificio, esta parte se tendría que mantener.