Belén cobra vida en Alcanadre

Casi doscientas personas volvieron a acercarse en la tarde de Navidad hasta Alcanadre para vivir con los vecinos del municipio la tradición del Belén Viviente. A eso de las siete y media de la tarde, el monte Viso se remontó más de dos mil años atrás para vivir las escenas más importantes del nacimiento de Jesús.

Después de dar un repaso por las historias más conocidas del Antiguo Testamento, comenzaron los momentos más entrañables de la escenificación, en la que participan casi medio centenar de personas: la Anunciación del embarazo de María y su vida tranquila en Nazaret, con escenas cosiendo y con José en la carpintería.

Asimismo, se representó la visita de María a su prima Isabel para felicitarla por el nacimiento de su hijo (luego San Juan Bautista), el decreto por el que todos debían censarse en su pueblo de origen, el viaje a Belén, el rechazo en cada una de las posadas y, finalmente, el nacimiento del pequeño Jesús en un establo junto a los animales que descansaban en la fría noche. El acto finalizó con la llegada de los Reyes Magos desde Oriente guiados por la estrella, su reunión con Herodes y la entrega de sus presentes: el oro, el incienso y la mirra. Un año más, todos disfrutaron de la primera de las actuaciones de una de las tradiciones más arraigadas de la Navidad riojana.