Lardero se alimenta para las fiestas

La Cofradía de San Marcial repartió unas 400 raciones de hornaje y queso en la festividad de San Antonio de Padua

P. HIDALGO

Martes, 14 de junio 2016, 01:16

Antaño el hornaje era concebido como un tentempié que se entregaba a las personas con escasos recursos, hoy en día la tradición de repartir esta vianda conocida como 'el pan de los pobres' se ha recuperado para, de algún modo, comenzar a hincarle el diente ... a las fiestas en honor a San Pedro y San Marcial de Lardero.

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Quedan unas dos semanas para que las calles del municipio se llenen de alegría y ayer los 'cigüeños' saborearon su primer aperitivo: el reparto de esta pasta de hojaldre rellena con chorizo, panceta, lomo y huevo cocido a cargo de la Cofradía de San Marcial con la colaboración del Ayuntamiento.

El acto comenzó en torno a las ocho de la tarde con una misa en la basílica del patrón, a la que acudieron el presidente del Gobierno de La Rioja, José Ignacio Ceniceros; la consejera de Presidencia, Begoña Martínez Arregui; y el alcalde de Lardero, Juan Antonio Elguea, entre otras autoridades locales y vecinos que abarrotaron el templo.

Al término de la ceremonia, el párroco de Lardero, Pedro Rosales, bendijo el hornaje, el queso y el vino que componen esta tradición. Luego los miembros de la Cofradía de San Marcial fueron sacando a la plazoleta de la basílica las 400 raciones de hornaje y queso para repartirlas entre los muchos vecinos que guardaron cola bajo un cielo plomizo, que finalmente retuvo la lluvia.

El acto, que se celebra con motivo de la festividad de San Antonio de Padua, se ha consolidado en el calendario festivo de la localidad, después de que en 1997 la Cofradía del patrón recuperase esta costumbre que hunde sus raíces en el siglo XVIII y que quedó suspendida durante la Guerra Civil. «Es consistente. Con esto ya he cenado», valoraba alguno en el exterior de la basílica mientras daba buena cuenta de la ración de hornaje y queso. Y para que no falten energías de cara a los inminentes festejos, aún se sirvió chocolate de postre. Y es que hacen falta fuerzas porque desde ayer el municipio asiste a un goteo de citas prefiestas que desembocará a final de mes en el cohete. La siguiente, la tercera cita con el vino este sábado.

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