Dos siglos al cuidado del Cristo

La tradición y la devoción suele pasar de padres a hijos hasta consolidarse en la historia de un pueblo. Y en Briones están de aniversario ya que la Cofradía del Santo Cristo de los Remedios celebra doscientos años desde su fundación. Fue en 1815 cuando una veintena de personas decidió fundar una hermandad para proteger la imagen del Cristo.

Y esta imagen también tiene su historia. Fue en el siglo XVI cuando mandaron tallar una imagen para guardarla en la urna que el notario custodiaba en su casa. El artista Francisco Martínez de Lubiano fue el autor de un Cristo que tenía que transmitir «el momento mismo de la expiración del Señor en la Cruz, que pareciera de carne y hueso y mostrara la máxima perfección de la naturaleza humana», tal y como relata Joaquín San Martín, portavoz de la cofradía.

Briones recibió la imagen y se decidió que el lugar idóneo para venerar al Cristo era la ermita de San Juan, por aquel entonces en estado de casi ruina. Durante una década, los vecinos de la villa y los devotos del Cristo costearon y ayudaron con su trabajo a recuperar la ermita. En 1748 terminaban las obras y en su inauguración, en enero, cuenta la historia que «había tanta gente que pasaron la noche a la intemperie».

La devoción por el Cristo fue en aumento y en 1815 se creó la hermandad que ayer conmemoraba esos dos siglos de historia. Y se hizo con el traslado de la imagen desde la ermita de San Juan hasta la parroquia, donde pasará el verano.

Los danzadores y muchos vecinos del pueblo veneraron la imagen y acompañaron al Cristo de los Remedios. Ya en la iglesia el coro parroquial interpretó la misa de Perossi y finalizaban así los actos de aniversario.

El día anterior tuvieron las vísperas, un vino de honor y la actuación del ballet Scherezane con su repertorio de clásico español.