16 municipios tendrán reductores de velocidad y pasos elevados

La Consejería ha detallado, en una nota, que se trata del refuerzo del firme de la LR-200 y mejoras puntuales en las travesías de Leiva, Tormantos, Herramélluri, Ochánduri, Cuzcurrita y Tirgo, con un presupuesto de 802.945 euros.

A ello ha sumado la urbanización de la travesía de Uruñuela en la LR-509, con un coste de 468.746 euros; y la instalación de reductores de velocidad en 16 municipios, por 303.638 euros.

El refuerzo del asfalto en la LR-200 tiene como fin aumentar la seguridad vial en esta vía, que facilita la comunicación de la comarca de Haro con Burgos, a lo largo de 6,5 kilómetros; así como en los tramos que atraviesan los cascos urbanos de estos seis municipios riojanos.

El proyecto contempla la reparación del firme y la renovación de la señalización horizontal y vertical y las marcas viales, junto con la mejora del balizamiento en las travesías de Tormantos y Leiva (LR-200); Herramélluri (LR-200 y LR-201) y Ochánduri, Cuzcurrita y Tirgo (LR-201).

Travesía de Uruñuela

La urbanización de la travesía de Uruñuela pretende regular la circulación de los vehículos que atraviesan el casco urbano de esta localidad y proteger a los viandantes que frecuentan esta zona.

La actuación afectará a un recorrido de 550 metros, donde se prevé la demolición de tres edificios en ruina para ampliar la visibilidad y la anchura de la calzada, además de acondicionar una pequeña plaza.

También se ampliará el pontón sobre el río Yalde para permitir el paso simultáneo de los vehículos que circulan en sentido contrario, ya que ahora solo es posible el paso alternativo, y se construirán aceras.

46 reductores y 31 pasos

La Consejería, además, prevé 46 reductores de velocidad y 31 pasos peatonales elevados en las travesías de 16 municipios durante 2014, con el objetivo de incrementar la seguridad vial en estos tramos urbanos de la red autonómica de carreteras.

Las travesías en las que se actuará en esta campaña corresponden a Arenzana de Abajo, Azofra, Casalarreina, Corera, Foncea, Gimileo, Manjarrés, El Rasillo de Cameros, El Redal, Sojuela, Sorzano, Soto de Cameros, Tudelilla, Ventosa, Villaseca y Villar de Torre.

Los reductores de velocidad y los pasos de peatones elevados resultan instrumentos de especial eficacia para reducir la velocidad de los vehículos que atraviesan los cascos urbanos de los municipios y, con ello, reducir el peligro de sufrir un accidente en estas zonas muy frecuentadas por vecinos y visitantes, ha precisado.