El patio de los juegos medievales

Niños y mayores encuentran durante estos días, en el Mercado Medieval que se celebra en Nájera, un espacio para ellos donde recuperar el 'jugar juntos', con «aquellos juegos tradicionales que animaban la competitividad y estimulaban la imaginación», según cuenta Juan Luis Amutio, presidente de ARNOAL.

Se trata del Rincón del Niño, en las plazas de España, o Mayor, y la de Navarra, que contienen juegos de la rana, damas chinas, mikado alemán, carreras de coches, laberinto de habilidades con los pies, puzzle, tres en raya de nueve piezas y un largo etcétera hasta contabilizar unos cuarenta juegos diferentes, a lo que se añaden otras actividades, como colchonetas para saltar, pintacaras o globoflexia.

Ayer, precisamente, se regalaban globos haciendo figuras a todos los niños que los quisieran.

Todos los juegos son gratuitos y lo único que se necesita para poder disfrutarlos es que estén libres o que haya hueco para más gente. O que se sepa cómo se juega. «Abuelo, dime cómo es este juego, que papá no lo sabe.!», decía un niño ante el tablero de damas chinas.

Este aspecto del Mercado Medieval es uno de los más cuidados por los organizadores, porque «desde el primer año que lo trajimos vimos que venían familias enteras para disfrutar juntos de estas cosas», explicaba Miriam Azofra, de la asociación organizadora del Mercado. «Hay personas mayores que notas que se emocionan al ver estos juegos de su juventud y que creían que habían desaparecido». Por ello, cada año han ido aumentando el número de actividades, excepto en la edición del 2013, que el Mercado contó con otros organizadores y los participantes que acudieron salieron muy disgustados porque se les cobraba en casi todas las actividades y las gratuitas eran muy escasas.

A estas iniciativas se suman las de la entrada al Monasterio, la de disparo con arco y flechas, las peleas de espadas y los paseos con burritos por la plaza de Santa María.