La cosecha de cereal en La Rioja será la peor de los últimos 35 años

Dicho informe prevé una cosecha para este año de 119.600 toneladas, una cifra muy baja que supondría un descenso cercano al 30% con respecto al ejercicio anterior, calificado como muy malo por el sector, y que dista mucho de las 216.000 que se han cosechado, de media, en los últimos cuatro años. Llama la atención, igualmente, el contraste entre el registro riojano y el del resto del país. Las estimaciones de las cooperativas apuntan a un aumento de toneladas tanto en las comunidades cercanas como en el conjunto de España, una tendencia que en La Rioja no se cumpliría.

¿Por qué ocurre esto? Desde una de las cooperativas de la región, Garu, se da una explicación. «En La Rioja Alta el año ha sido muy malo», sentencia José Moneo. «De Santo Domingo a la zona del Tirón, pasando por Herramélluri, Leiva, Treviana o Cuzcurrita, el cereal está peor que el año pasado, y eso que 2023 fue muy malo», añade.

Moneo reconoce que, en las zonas «más pegadas a las montañas» la situación resulta más favorable, pero el resto sufre la ausencia de lluvias durante Semana Santa. «Si hubiera llovido como en el resto de España, se habría arreglado. Sin embargo, en vez de caer 100 litros cayeron diez», apunta. «Luego llovió en San Isidro, pero ya era tarde», remata.

De cualquier manera, el informe de las cooperativas habla de estimaciones. No puede ser de otra manera porque la cosecha no ha comenzado aún. De hecho, Néstor Alcolea cree que «será difícil» que este año sea peor que el pasado. «En 2023 el cereal fue un absoluto desastre y este año el aspecto general es mejor, aunque hay zonas que han sufrido bastante», certifica el secretario de Organización de UPA. «De cualquier manera, hasta que no se empiece a cosechar no se va a ver», remata.

Óscar Salazar, cerealista de Foncea y presidente de UAGR, considera que hay municipios que sí están peor que el año pasado. «Todo indica que va a haber un bajón de rendimientos», lamenta. «Hay zonas en las que las pérdidas pueden estar en torno al 70 o al 80% de un año normal», asegura.

Si se cumpliesen estas negativas previsiones, los agricultores encadenarían tres años con descensos en la cosecha. «Y eso se une a un aumento desorbitado de los costes de producción y a una caída en el precio del cereal para convertir en dramática la situación de los agricultores», cuenta. «La sequía que está sufriendo La Rioja es terrorífica y donde más está afectando es a los pueblos en los que más cereal hay: va a haber explotaciones que no van a poder continuar», avisa el agricultor.

Igor Fonseca, mientras, recuerda que esto son solo previsiones y que todavía no se sabe cuál va a ser la merma en la cosecha, pero sí que vaticina que algunas zonas van a registrar «muy bajos» rendimientos. «En la zona más septentrional de La Rioja, que es la más productiva, es donde menos ha llovido en el momento en el que más falta hacía», cuenta el secretario general de ARAG-Asaja. «También les pasó el año pasado, pero el efecto fue menor», apostilla.

Desde las organizaciones agrarias de la región, por último, coinciden en la necesidad de ayudas para este tipo de situaciones. «Hemos pedido a la Consejería que las evalúe», apunta Fonseca, mientras Salazar cree imprescindible la convocatoria de la Mesa de la Sequía. «En otras comunidades lo han hecho y aquí hace falta porque nos tenemos que juntar para buscar soluciones: tres años de pérdidas son muchos y la situación en muchas explotaciones es crítica», recalca el de UAGR.

En ese sentido, desde el Gobierno de La Rioja se anunció a finales de mayo la elaboración de un listado de municipios y cultivos afectados por la sequía para implementar ayudas, aunque desde las organizaciones agrarias aún no tienen constancia de que sea una realidad. «No sabemos cómo esta ese tema», afirma Salazar al tiempo que Fonseca cree que dicho informe estará ya hecho o «a punto» de completarse. Alcolea, por último, expone: «Creo que no hace falta hacer ese estudio estadístico, sino que el agricultor de cualquier zona que dé un parte por sequía y Agroseguro se lo reconozca, se lo perite y lo tase como tal, ha de poder cobrar esa ayuda».