J. I. GASCO
Domingo, 31 de enero 2010, 01:50
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Hasta 608 millones de litros de vino permanecen guardados en los calados y cementerios de las bodegas de La Rioja. El volumen se traduce, en valor de mercado y sin contabilizar la última cosecha, en unos 2.500 millones de euros.
A falta de contabilizar el último mes del año pasado, las existencias del Rioja suman 608 millones de litros reposando en las bodegas a la espera de su posterior venta en los mercados nacionales y en los extranjeros o bien en el periodo de cumplir los años que exigen sus respectivas crianzas, según los datos facilitados por el Consejo Regulador de la D.O.C. Rioja, y a los que ha tenido acceso Diario LA RIOJA. Esta cantidad supone un incremento del 6% respecto a las existencias del ejercicio anterior (573 millones de litros). Estas cantidades están a falta de incluir la producción de la última vendimia del pasado año, que actualmente se encuentra en proceso de calificación.
El descenso del consumo del vino de Rioja -en noviembre último era del 7,69% que corresponde a una caída de casi el 6% en los mercados nacionales y del 11,5% en los mercados extranjeros- provocó un aumento de 35 millones de litros en sus existencias.
La mayoría de los caldos que se encuentra en reposo pertenece a los criadores (588 millones de litros), seguida de las bodegas cooperativas con poco más de 37 millones de litros. En tercer lugar figuran los cosecheros riojanos con unos 4 millones de litros. Finalmente los almacenistas guardan unos 3 millones de litros.
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De los 608 millones de litros que 'duermen' en los calados, casi 600 millones corresponden a tintos. A gran distancia están los blancos (5 millones) y los rosados (3,7 millones).
Por cosechas, la más abundante -debido a la cercanía de su elaboración- es la añada del 2008, calificada como muy buena, con unas existencias de 208 millones de litros. En torno a los 202 millones de litros corresponden a tintos y el resto, a blancos y a rosados (3 millones cada uno).
Le siguen los vinos de la añada del 2007, también calificada como muy buena, con unas existencias de 171 millones de litros (170 millones tintos, y un millón repartido entre blancos y rosados). De la añada del 2006, clasificada como muy buena, hay en reserva casi 102 millones de litros, que en su mayoría son tintos, y unos 200.000 de blanco y otros 100.000 de rosados. Destacable por la cantidad es, asimismo, la añada del 2005 -excelente- de la que quedaban al mes de noviembre último casi 67 millones de litros. Otra cosecha carismática fue la del 2004, calificada de excelente- de la que quedan en las bodegas 30 millones de litros.
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Los calados y cementerios de las bodegas riojanas todavía conservan vinos de seis cosechas que fueron calificadas como excelentes por el pleno del Consejo Regulador de la D.O.C. Rioja, y que totalizan más de 110 millones de litros. Estas cosechas corresponden a las añadas de 1982 con poco más de 51.000 litros; la de 1994 con 73.000 litros; la de 1995 con 366.000 litros; la del 2001 con casi 11 millones de litros; la del 2004 con otros 30 millones de litros; y la del 2005 con 67 millones de litros de vino.
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