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Los componentes de la orquesta najerina, en el Arrigoni, el típico teatro a la italiana. / D. C. M.
Bravo, bravísimo
COMARCAS

Bravo, bravísimo

La orquesta najerina La Orden de la Terraza, aclamada por el público en los dos conciertos ofrecidos en Italia, dentro de las X Jornadas Nacionales sobre Mandolina y Música de Plectro

DESIDERIO CERRAJERÍA

Martes, 3 de noviembre 2009, 10:13

Llegó a Italia y arrasó. La Orden de la Terraza participó, recientemente, en las X Jornadas Nacionales sobre Mandolina y Música de Plectro. La primera parada fue en Vittorio-Veneto, una villa de 30.000 habitantes, situada en la provincia de Treviso al pie de los Alpes Dolomitas.

En el aula magna del seminario Vescovile de Ceneda, sede de las Jornadas, el grupo ofreció su concierto. El señorial edificio estaba repleto de un público deseoso de escuchar a una orquesta precedida de fama y prestigio. En primer lugar, los músicos tocaron las cuatro partes de la del maestro Jorge Cardoso, composición para dos guitarras y orquesta que bordaron con cuerdas de seda en un alarde de finura tímbrica. Sonaron los primeros bravos. La segunda pieza fue de J.M. Expósito, recreación musical de una danza del folclore argentino llena de ritmo y vigor. , segundo premio del Concurso de Composición 'Ciudad de Logroño' en el 2006, puso de relieve que, además de interpretar y dirigir, Carlos Blanco sabe escribir con destreza en el pentagrama. A continuación, , la preciosa leyenda budista que Y. Kuwahara convirtió en sublime balada musical, arrancó los segundos bravos y los primeros bravísimos. El colofón del repertorio consistió en el estreno absoluto de la obra ganadora en el concurso de composición 'Ciudad de Logroño 2009', , una partitura de lenguaje complejo y exigente ejecución escrita por Luigi Salamon, oriundo de la comarca. El autor, presente en el acto, compartió con la orquesta la gloria de los vítores entre exclamaciones de bravo, bravísimo y súper. El bis del fandango de levantó al público de sus butacas en una aclamación prolongada que certificó el éxito de la orquesta con nota cum laude.

Segundo concierto

El segundo concierto tuvo lugar en la localidad de San Vito al Tagliamento. El repertorio fue el mismo pero el marco sólo podía presagiar que algo especial sucedería. La orquesta iba a tocar sobre el escenario del Teatro Arrigoni, un edificio del siglo XVIII, restituido al detalle sobre la estructura original de lo que se conoce como teatro a la italiana. Un piccolo capricho con un patio de butacas bajo dos palcos en semicírculo de delicioso sabor veneciano. El concierto conmemoraba el 40 aniversario de la fundación de la Orquesta de Plectro Sanvitese y a él acudió un público selecto. El final desató el entusiasmo.

El balance colmó a los músicos y no es exagerado afirmar que el patrimonio cultural riojano tiene en La Orden de la Terraza uno de sus bienes más preciados.

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