Borrar
Juan Herreros e Iñaki Ábalos, ante la maqueta de su proyecto para la estación. /J. RODRÍGUEZ
Los redactores del proyecto de soterramiento estudian la forma de salvar la estación de Renfe
I URBANISMO I INFRAESTRUCTURAS FERROVIARIAS

Los redactores del proyecto de soterramiento estudian la forma de salvar la estación de Renfe

Los arquitectos no descartan desmontar el inmueble actual para levantarlo en otro sitio para evitar nuevas demoras en el proyecto y desplazar la futura terminal de autobuses

LA RIOJA

Domingo, 13 de enero 2008, 01:50

Los arquitectos redactores del plan especial asociado al soterramiento del ferrocarril en Logroño han recibido esta semana el encargo de estudiar la forma de conservar el cuerpo central de la actual estación de Renfe en la capital riojana. El proyecto original presentado en su día, y ya aprobado inicialmente por la anterior Corporación municipal, preveía la demolición del inmueble. Sin embargo, en el denominado 'Acuerdo Programático sobre el Gobierno de la Ciudad de Logroño 2007-2011', firmado en Madrid por PSOE y Partido Riojano, se incluyó el compromiso de «mantener el actual edificio de la estación».

El cumplimiento del pacto entre socialistas y regionalistas obligaría a reconsiderar al menos tres de los extremos contemplados en el proyecto del soterramiento: una nueva 'cota cero', por debajo de la que se calculó en la planificación propuesta; la ampliación hasta el sector Los Lirios, Piqueras y El Cubo del trazado que discurrirá bajo tierra y, por último, el mantenimiento del edificio de la estación de ferrocarril.

Los dos socios en el nuevo ejecutivo municipal de Logroño esperan que los técnicos sean capaces de aportar una solución que no eche por tierra uno de los compromisos más publicitados de su pacto de gobierno. Las dificultades se derivan, por una parte, de la imposibilidad de conservar el cuerpo central de la actual estación ferroviaria si el equipo redactor no encuentra la fórmula para desplazar el emplazamiento previsto para la futura estación de autobuses y, en su caso, variar los accesos proyectados en el plan especial. De lo contrario sólo cabría desmontar el edificio que se quiere preservar y reconstruirlo después en otro lugar o modificar el plan especial, con la consiguiente demora añadida a las que ya ha sufrido el proyecto.

Nuevo retraso

Expertos en urbanismo consultados por Diario LA RIOJA calculan que el nuevo retraso si hubiera que abordar un nuevo plan especial rondaría un año, sumados los tiempos necesarios para redactar el nuevo proyecto, someterlo a la sociedad gestora del soterramiento (Logroño Integración del Ferrocarril) y cumplir con los requisitos administrativos, que incluyen la aprobación inicial por el Pleno del Ayuntamiento de Logroño, exposición pública, consideración de alegaciones, aprobación provisional y aprobación definitiva.

Lo que es seguro es que resulta materialmente imposible mantener en su ubicación actual el edificio de la estación ferroviaria de Logroño sin que se vea afectada la futura estación de autobuses. De acuerdo con lo planificado por Iñaki Ábalos y Juan Herreros, la nueva terminal de transporte de viajeros por carretera ocuparía una parte del suelo sobre el que se levanta el inmueble que el pacto de gobierno PSOE-PR quiere conservar. Así se refleja en la planificación urbanística puesta en marcha y que será necesario modificar de forma obligada.

Si la enmienda no es muy relevante, como ocurriría con el desplazamiento de la nueva estación de autobuses «unas decenas de metros», fuentes próximas al Ayuntamiento aseguran que sería posible abordar la nueva situación en el mismo trámite de aprobación provisional del plan especial. Por el contrario, si la modificación tuviera más calado se haría imprescindible retroceder en el proceso administrativo y asumir nuevos retrasos.

Alternativas

En ese supuesto, una de las pocas alternativas posibles para salvaguardar el edificio sin que ello repercuta en más aplazamientos en las ya de por sí muy demoradas obras del soterramiento sería la de «desmontar» el cuerpo central de la actual estación de ferrocarril para volver a erigirlo, piedra sobre piedra, en un lugar distinto.

Esta solución, sobre la que también se ha propuesto a los arquitectos que reflexionen, no tendría una incidencia importante sobre el calendario de ejecución, pero añadiría más costes, difíciles de calcular, a un proyecto cuya financiación incorpora nuevas incertidumbres. La principal sería el recálculo de los ingresos previstos por la venta de suelo si el mercado inmobiliario confirma la ralentización que se viene manifestando desde hace más de un año.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja Los redactores del proyecto de soterramiento estudian la forma de salvar la estación de Renfe