SUDANDO. Tvedten observa los ejercicios de Ángel Romero en el gimnasio. / J. HERREROS
I BALONMANO I CIUDAD DE LOGROÑO

Todo en orden

PÍO GARCÍA

Jueves, 2 de agosto 2007, 02:11

El Ciudad de Logroño suda de lo lindo. A las diez de la mañana y con treinta grados a la sombra, los integrantes de la plantilla corren por La Grajera y luego se fajan en el gimnasio sin ahorrar un ápice de esfuerzo. «Este año, entrar en el siete inicial está muy caro porque la competencia es mucha y eso se nota en la intensidad de los entrenamientos», advierte Luismi Ascorbe, preparador físico. Ayer el equipo tuvo descanso vespertino: unas horas para reponerse de las carreras por el monte y del trabajo con los aparatos. Pero hoy vuelven ya a la sesión triple: a las diez de la mañana, en La Grajera; una hora después, en el gimnasio; y ya por la tarde, a las seis, regreso al Palacio de los Deportes. Son las dos semanas más físicas de la temporada. Y la gente responde: «Están muy bien -indica Ascorbe-; han venido en condiciones». Y eso se aprecia especialmente en un equipo con la rotundidad física del Ciudad de Logroño: ver manejarse en el gimnasio a forzudos como Fis, Belaustegui u Oneto es ya de por sí un espectáculo.

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Las noticias sobre la recuperación de los lesionados son, además, positivas. La resonancia magnética practicada a Havard Tvedten ha rebajado la preocupación por sus molestias. El extremo noruego sigue arrastrando la lesión que se produjo en el penúltimo partido de liga, agravada por sus compromisos internacionales, pero las pruebas ya no aprecian rastro de rotura en los isquiotibiales. Persiste, eso sí, una inflamación en la zona, por lo que Tvedten debe seguir un proceso de recuperación. En estos primeros días de trabajo, se ejercita a su propio ritmo, aunque el médico del club, Pedro Terreros, confía en que la estrella noruega se una al resto del grupo en un par de semanas.

También Diego Pérez Marne tuvo ayer revisión en Valladolid. Y con resultado positivo: «Va muy bien -indica Terreros-. La recuperación avanza sin complicaciones». Aunque la lesión de Marne -rotura del tendón rotuliano- exige un plazo de recuperación muy amplio, lo positivo es que no haya que lamentar regresiones: «Todo va siguiendo su curso y eso es ahora lo importante. No hay derrame ni inflamación en el tendón ni nada anormal», indica el médico.

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