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L.R
Martes, 28 de mayo 2013, 01:43
Antonio Ceular, de 52 años, vecino de Casalarreina, casado y con dos hijos, falleció ayer en un fatal accidente que se produjo al quedar aplastado entre su propio vehículo y una excavadora cuando trabajaba en las instalaciones de una empresa de la localidad vizcaína Valle de Trápaga.
Pasadas las dos de la tarde, el camionero riojano detuvo su vehículo, abandonó la cabina y bajó al suelo, con la puerta abierta, junto a una excavadora. Todavía no se sabe a ciencia cierta qué es lo que ocurrió, pero las primeras investigaciones creen que el fallecido podría haber dejado el camión sin el freno de mano echado. Al parecer, cuando comenzó el proceso de descarga de los materiales que había trasladado hasta allí el vehículo pesado comenzó a moverse con dirección a la excavadora quedando A.C. atrapado entre los dos vehículos.
Según fuentes de la investigación, el camionero intentó acceder hasta la cabina del vehículo para activar el freno de mano pero la puerta que él mismo había dejado abierta le jugó un fatal jugada porque le impidió salir del hueco en el que se encontraba. Finalmente murió por aplastamiento cuando el camión llegó a colisionar con la excavadora.
La noticia del fallecimiento de Antonio Ceular enseguida se propagó por Casalarreina, su localidad natal, y por Haro y Santo Domingo. El camionero riojano era un gran aficionado al deporte y jugó en los equipos de fútbol de estas dos últimas localidades.
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