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MARTÍN SCHMITT
Martes, 26 de febrero 2013, 01:40
Todos los años ocurre lo mismo. Llegan estas épocas del año y el mercado del mundo del balonmano despierta de su hibernación para dar rienda suelta a una cascada de rumores. Algunos provocados por los medios de comunicación; otros por los clubes, aunque también los jugadores alimentan los dimes y diretes de un planeta que pese a parecer infinito, es bastante pequeño.
La semana pasada, medios de Valladolid publicaron que el crack franjivino Niko Mindegia iba a ser uno de los refuerzos que Juan Carlos Pastor se iba a llevar al Pick Szeged húngaro, algo de lo que el jugador no quiere hablar. «No sé de dónde habrán sacado esa información», afirmó ayer el central poco antes del entrenamiento vespertino del Naturhouse, que mañana recibe al Ciudad Encantada de Cuenca por la Copa del Rey. El jugador navarro explicó que, por ahora, prefería mantenerse al margen. Cierto es que Pastor intentó hacerse con los servicios del de Santesteban hace unos años sin suerte. La realidad indica que el jugador firmó un año de contrato por el Naturhouse, con una opción de otro más si ambas partes estaban de acuerdo. Pero además, el jugador tenía una cláusula en su contrato para marcharse al cumplirse el primer año si así lo decidía.
Como es habitual, los responsables del CB Ciudad de Logroño declinaron hablar sobre el asunto y reiteraron su política de no referirse a los contratos o marchas de los jugadores de la plantilla. Sin embargo, no escondieron que en estos momentos están sondeando el mercado.
Pese a ello, la rumorología sigue en marcha y en cada partido que juega el Naturhouse en el Palacio de los Deportes los 'fichajes' y las 'salidas' están a la orden del día.
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