Un reto de risa para Migui y Edu

Miguel Capellán y Eduardo García tienen mañana una cita con el público en el Teatro Avenida (20.30 horas). También un reto: hacerle reír. Es su premio por participar en el concurso de monologuistas calceatenses celebrado el día 16 dentro del programa 'Juventud a saco'. En su mayor escenario pisado hasta la fecha compartirán cartel con los televisivos Xavier Deltell y Bermúdez. El humor une a todos ellos, pero, en el caso de estos dos jóvenes es sólo una afición. Y valor.

Miguel se reconoce nervioso. «Más que nada porque sé que va a haber mucha gente», intuye. Tiene 30 años y lleva dos combinando palabras y humor, algo que empezó en el aniversario de un local de la cuadrilla. Alguien dijo: «¿Hacemos unos monólogos?». Dicho y hecho. «Parece que gustó y enseguida nos llamaron de bares», cuenta. Ha hecho algunos 'bolos' en establecimientos locales, de Logroño o Ezcaray, por donde ha paseado su humor, pelín ácido. «Me gusta el humor moderno, un poco también el absurdo», explica. Tampoco obvia lo «políticamente incorrecto».

Enfundado en su camiseta de 'Motel Lazarus', grupo musical del que forma parte, habla de la cita de mañana, en la que al tamaño del público une la excepcionalidad de compartir tablas con Deltell y Bermúdez. «Habrá que dar el máximo», cuenta de su actuación, que incluirá una «sorpresilla» para su compañero y una selección de sus mejores gracias. «Esta vez no me la voy a jugar con cosas nuevas», adelanta.

Eduardo tiene 28 años y fama bien ganada de chistoso, pero no fue hasta hace año y pico, en la boda de un amigo, cuando se tomó el asunto algo más en serio, si es que vale la expresión. «Nos dijo en bromas que si le preparábamos alguna cosilla y le hice un monólogo», cuenta. La actuación de mañana será su quinto monólogo público. «Según se va acercando la fecha siempre sientes los nervios típicos, pero en este caso hay una pizca más por tener que actuar en el Avenida y delante de tanta gente» reconoce. Desde el escenario desgranará «una recopilación de historias que parece que han gustado, para intentar que la gente disfrute y se ría con nosotros», explica. Su humor, al igual que el de Miguel, también está más enfocado a la gente joven, y se nutre de temas de actualidad, «llevándolos al máximo». Lo suyo es también una afición, sin más. «Me gusta hacer gracias y tonterías, me lo paso muy bien y me río de mí mismo, que es lo esencial, para poder hacer reír a los demás», cuenta. Mañana, con todos ustedes, Miguel y Eduardo.