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DIEGO MARÍN A.
Domingo, 8 de mayo 2011, 13:02
El Náxara ganó ayer media liga de Tercera al vencer al Agoncillo en San Roque. A falta de una jornada para la conclusión de la liga, si la S.D. Logroñés pierde hoy ante el Vianés los najerinos se proclamarán matemáticamente campeones. Pero no lo tuvo fácil el Náxara, que se encontró a un Agoncillo que, aunque ya no se juega nada, disputó el partido como si le fuera la vida en ello.
Los jugadores najerinos saltaron al campo nerviosos, tensos, quizá abrumados por la responsabilidad y quizá por ello sin demasiado acierto en sus primeras acciones. El juego estaba dividido y los errores fueron los protagonistas en los dos equipos. Así, en el minuto 34 llegó el primer tiro a puerta limpio del partido. Fue De Val el que probó suerte desde lejos con un tiro que atrapó Miguel sin problemas. Parecía que la primera parte iba a acabar apaciblemente, pero no fue así. Iván, tras un encontronazo con Ángel, propinó a éste un cabezazo que le mereció la tarjeta roja directa, después de haber visto antes la amarilla. Tras un nuevo disparo de Kopi, que atajó Miguel en una buena acción, se acabó la primera parte.
A pesar de jugar con un hombre menos, el Agoncillo se adelantó en el marcador en la segunda mitad. Luis centró una falta en la banda de derecha que controló Joni en el segundo palo, centró de nuevo y Gemelo remató de cabeza, a placer y libre de marca, para marcar gol. No le duró mucho la alegría a los locales porque en la siguiente jugada el propio Gemelo tocó el balón con el brazo dentro del área y el árbitro decretó un penalti que marcó Pablo.
Con el marcador de nuevo empatado, el Agoncillo desapareció y el Náxara buscó la victoria por todos los medios. Solo Joni protagonizó alguna jugada personal a favor del Agoncillo. A nadie extrañaba entonces que el Náxara perdiese el liderato y la liga en San Roque. Más aún cuando Pablo falló, tirando alto, un nuevo penalti que provocó Juan tras una buena jugada por banda izquierda, en la que se fue de tres defensas, hasta que le derribó Navarro dentro del área y el árbitro pitó otro penalti a favor del Náxara.
Los najerinos no se vinieron abajo y continuaron dominando de forma abrumadora. El Náxara merecía la victoria, pero había desperdiciado una buena oportunidad de marcar, y la entrega del Agoncillo también podía verse recompensada justamente con el empate. Pero en el minuto 84 Joni derribó a un rival sobre la frontal de su área. Juan lanzó la falta y metió el balón por la escuadra. Fue un gol magistral que le puede valer la liga al Náxara, y como tal fue celebrado por los najerinos. Con el descuento, todavía se jugaron diez minutos más de partido en el que el Agoncillo buscó con ahínco el empate pero ni siquiera pudo volver a tirar a puerta.
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