El Naturhouse confirma su sueño europeo

Espectacular. El Naturhouse dio anoche un paso muy importante hacia los cuartos de final de la Copa EHF, al establecer un margen de 13 goles de renta para el viaje del fin de semana que viene a tierras húngaras. Y lo mejor fue que lo hizo con un gran balonmano y marcando muchísimos goles (pocas veces ha rozado los cuarenta), anulando por completo a un equipo que por momentos es 'Ivo Díaz dependiente'.

Cierto es que el partido importante para los de Jota es el miércoles, frente al Torrevieja, pero la Copa EHF e sun premio que los de Jota González se tienen muy merecido. Y cada vez que le toca vestirse de Europa, lo hace con prestancia, con potencia y solvencia, gustando, pasándoselo bien. Como anoche, en una jornada en la que el Palacio de los Deportes volvió a vivir con la EHF.

El CB Ciudad de Logroño comenzó con firmeza, golpeando al Tatabanya Carbonex tácticamente, jugando con rapidez el balón ante una defensa 3-3 que se abrió demasiado. Así, Velasco jugó a su antojo, encontrando a Garabaya por el medio y enlazando bien con los laterales. Además, en el otro lado de la cancha Gurutz Aginagalde comenzaba a edificar un muro en su portería. Esto permitía salir con rapidez desde el fondo para marcar varios goles fáciles a la contra.

Así, para el minuto 10, los locales ya ganaban 5-1, lo que obligó a Viktor Debre a pedir su tiempo muerto. Y el Tatabanya reaccionó, gracias, sobre todo, a un cambio táctico, al replegar su defensa a los seis metros y armar un 6-0 tradicional. Víctor Hugo López, en muy buena forma pero todavía un poco ansioso, estrelló varios lanzamientos en los postes, y Amargant no encontró huecos en la impermeable defensa visitante. Los húngaros se crecieron y con un gran parcial (0-5), con Ivo Díaz y el pivote Balint Pordan inspirados, se colocaron arriba en el marcador.

Pero el Naturhouse no desesperó. El partido estaba equilibrado y Paco López sustituyó a Víctor Hugo. El vallisoletano marcó dos goles que, sumado a otro de Ismael Juárez (que ayer anotó en diez ocasiones) y uno más de Sasha Tioumentsev, llevaron la tranquilidad a la afición franjivina. Mientras tanto, Gurutz Aginagalde continuaba con una gran actuación -la tercera consecutiva del capitán, por cierto-, ayudado por una buena defensa local, que colocó un 5-1 sobre el lateral izquierdo, algo que descolocó al Tatabanya Carbonex.

Fiel a su guión

De esta manera, y con esa misma táctica y grandes paradas del portero de Irún, el Ciudad de Logroño fue ampliando su margen para llegar al descanso con un cómodo 18-13 a su favor.

En la segunda parte, las cosas siguieron de la misma manera. El Naturhouse se aferró como un clavo ardiendo al guión que le dio unos réditos tan sustanciosos en la primera etapa. Continuó con la misma defensa, con un Arrieta (que volvió después de varias semanas de inactividad) de avanzado, asfixiando a Halasz y a Nagy. Y de ahí a las contras, en donde Ismael Juárez seguía aumentando su renta particular.

El Naturhouse aumentaba su protagonismo. Y jugaba con tranquilidad, sin desesperarse si había alguna pérdida de balón (ayer pocas, algo destacable), sobre todo en la defensa. De hecho, la primera línea y los pivotes húngaros seguramente tendrán pesadillas con el número 17 franjivino. Rubén Garabaya firmó anoche una actuación impresionante, impenetrable en la retaguardia local y fulminante en los seis metros húngaros, bien disparando a un Szente que nada pudo hacer para impedir la goleada o bien abriendo el camino para que Sasha, Dujshebaev o Praznik penetraran para convertir. Con un buen socio en Amargant, ambos han edificado una muralla difícil de traspasar.

Ya en el minuto 18 de la segunda parte, el Naturhouse había establecido un abismo entre uno y otro equipo, con un 30-20 en el marcador. Incomprensiblemente, el Tatabanya Carbonex volvió a defender en un 3-3 y esta diferencia en el luminoso se mantuvo hasta los últimos minutos, en los que el Naturhouse volvió a pisar el acelerador y prácticamente liquidar la eliminatoria.

El Naturhouse celebró la meritoria victoria con la afición desde el centro de la pista, aunque a partir de hoy mismo tendrá que volver a cambiar el chip y ponerse el mono de trabajo. Antes de Hungría, debe enfrentarse al Torrevieja en un partido que se convierte casi en una final.