Primeros detalles, ninguna conclusión

Primeros detalles. Apenas, cuatro contados. Lo lógico en el primer partido de la pretemporada. Con las piernas cansadas, cargadas, congestionadas de las largas carreras y ejercicios de preparación. Quedémonos con esos detalles, quizá detallitos, porque conclusiones no se pueden sacar. Y si se sacan, hay mucho riesgo de que éstas sean erróneas. Quizá concluir, así pues, sea exagerado, pero no tanto hablar de las sensaciones que dejó la Unión Deportiva Logroñés en su empate a uno ante Osasuna B.

Algo típico de este amistoso debut: muchas pruebas. Jugadores del filial con minutos. De entrada, Visnjic preparó dos onces, uno para cada parte. El del primer período vio cómo Osasuna se adelantaba en el marcador en el minuto 18. Castillo se metió dentro del área por el costado zurdo y cedió para que Evelin enviara con cierta comodidad la pelota a la red. Pero esos mismos jugadores de los primeros 45 minutos fueron quienes hicieron el empate. Penalti sobre Iñaki que transformó Osado.

La primera parte dejó un buen ritmo, pese al cansancio de los futbolistas. Gustó en Osasuna Timor, ex del Valencia Mestalla y buen organizador. En la Unión Deportiva, debutaron el portero Vicente, el lateral Garrido y el delantero Sota, riojabajeño del filial. Del guardameta apenas podemos hablar; de Garrido, contundencia y alguna laguna propia del cansancio; Sota dio la cara: quiere un sitio.

Jugador interesante

Vayamos con la segunda parte. Once distinto en el Logroñés. Debutó Nacho y la sensación es que estamos ante un tipo sólido, que aporta fuerza y trabajo en la medular. Futbolista interesante, tal y como señalaban las referencias. Otra noticia fue el feliz regreso de Pepe a los terrenos de juego, tras su larguísima lesión. Por último, también se estrenó de blanquirrojo De las Heras

En estos segundos 45 minutos, dominó más el conjunto riojano, aunque sin claras ocasiones, pese a que Popo dejó un par de chispazos. Pero fue Osasuna quien se acercó más al gol. Un disparo de Torres se envenenó por el camino, pero se fue al larguero. Jugaba Rubio y, como siempre, su ángel de la guarda. En fin, un empate que sólo es otra escala en el trabajo de pretemporada.