Centro de la Cultura del Rioja, un gran proyecto

El Centro de la Cultura del Rioja es una extraordinaria oportunidad para la ciudad; será un referente internacional en materia vitivinícola; un elemento turístico diferenciador y representará el impulso definitivo en la recuperación del Casco Antiguo. Desde el Partido Riojano nos comprometimos en nuestro programa electoral en apostar por la diversificación de sectores productivos que generarán actividad económica y, en ese planteamiento, el sector turismo tiene un especial protagonismo.

Al asumir responsabilidades de Gobierno en el Ayuntamiento hemos cumplido ese compromiso con una apuesta ambiciosa y decidida por la promoción turística de Logroño en el exterior. El resultado está ahí. En el 2009 pasaron por la Oficina de Turismo 70.300 personas, el 43% más que el año anterior y el 130% más que en el 2006, cuando el turismo aún lo gestionaba el Partido Popular.

La tendencia al alza continúa en 2010. Creo que estamos haciendo las cosas razonablemente bien. Y es que no se trata de batir récords de visitantes; la importancia de estos datos reside en que, según los estadísticas, cada turista deja en Logroño por día de estancia entre 200 y 300 euros. y eso son muchos ingresos para la ciudad y sus vecinos; implica creación de actividad económica y, por lo tanto, empleo.

En ese sentido, en el Partido Riojano estamos convencidos de que es necesario dar continuidad a la promoción exterior de la ciudad y, al mismo tiempo, crear poco a poco, nuevos atractivos. El Conjunto Arqueológico de Valbuena, la recuperación de la muralla o el Calado de San Gregorio son algunos ejemplos.

El Centro de la Cultura del Rioja (CCR) es el protagonista esencial de ese planteamiento. El CCR es una gran idea, un gran proyecto y una extraordinaria oportunidad. En pleno centro de la ciudad, en el corazón del Casco Antiguo, el CCR va a generar un importantísimo flujo de personas del que se va a beneficiar el conjunto de la ciudad; algo que la propuesta defendida por el Partido Popular -situada a 5 kilómetros del casco urbano- olvidaba. El PP quería un hotel con spa. El PP no pensaba en la ciudad, situaba su 'centro temático' en La Grajera y lo convertía en un lugar de paso, no de estancia en Logroño. No generaba beneficio alguno a los logroñeses; era una improvisación más.

Ahora, el CCR puede presumir también de ser un excepcional proyecto arquitectónico firmado por el riojano Jesús Marino Pascual, que combina la recuperación patrimonial del Palacio de los Yanguas con el elemento contemporáneo que representa el gran botellero que preside la fachada principal; un símbolo y una referencia estética. Pero también, el CCR es una gran oportunidad. Será un referente internacional sobre el mundo del vino y, en especial, del 'Rioja'. Historia, arte, aspectos sociales, enológicos, de elaboración, espacios de exposición, divulgativos, zonas de cata, bodega, referidos a la actividad económica, pedagógicos y formativos (cursos y conferencias), de interés para investigadores, biblioteca, etnológicos, centro de negocios, lúdicos, información turística, todo tendrá cabida en el CCR.

Será igualmente, un elemento diferenciador de Logroño desde el punto de vista turístico, respecto a otras ciudades y regiones. Un atractivo por sí sólo, pero capaz de poner en valor a través de su efecto imán todos y cada uno de los elementos de los que pueden presumir La Rioja y Logroño.

Y será -ya lo está siendo- el impulso definitivo para la recuperación del Casco Antiguo, ya que el CCR ejerce de aval de que su revitalización ahora sí va en serio. Así, de forma paralela, han surgido otros proyectos importantes: dos nuevos hoteles ya en construcción en las calles Ruavieja y Mayor; el Plan Especial Mercaderes con 45 viviendas; 12 pisos más en la calle Mayor dando continuidad a la fachada del Casino o el proyecto 'Puerta Gótica' que, situado al final de la calle Ruavieja junto a Sagasta, recupera siete calados subterráneos. El CCR participa de la rehabilitación arquitectónica, urbanística, comercial y social del Casco Antiguo, fomentando de forma importante la actividad económica en el entorno y, eso significa como todos sabemos, creación de empleo.

El Centro de la Cultura del Rioja es, como decía, una gran idea, un gran proyecto, y una extraordinaria oportunidad para la ciudad. En el Partido Riojano creemos que el esfuerzo merece la pena.