Secciones
Servicios
Destacamos
PABLO OJER
Lunes, 6 de julio 2015, 10:23
Pamplona se enfrenta a 204 horas de juerga, alegría y diversión con el inicio de los Sanfermines 2015. Puntual como el reloj de la Casa Consistorial, a las 12 del mediodía, Chantal Estrade y Javier Aranegui han prendido el Chupinazo utilizando la fórmula habitual, Pamplonesas, ... pamploneses, iruñeako, Viva San Fermín, gora San Fermín. Un calor intenso, cercano a los 30 grados, no ha impedido que más de 10 mil en la plaza Consistorial y cientos de miles en otros puntos de la ciudad hayan estallado impregnados de alegría y ganas de pasárselo bien.
más información
Sin embargo, el Chupinazo 2015 pasará a la historia como el primer inicio de fiestas presididos por una ikurriña.
Minutos después de las 11 de la mañana, un operario ha extendido la bandera de la Comunidad Autónoma del País Vasco en un mástil previamente preparado. La ikurriña ha sido colocada entre la bandera española y la bandera de Pamplona, dejando apartada a la bandera de Europa y a la de Navarra.
La Delegación del Gobierno ya ha anunciado que ha presentado un recurso ante el juzgado de lo Contencioso Administrativo por incumplimiento de la Ley de Símbolos. Sin embargo, el alcalde, Joseba Asirón, había asegurado que, pese a colocar la ikurriña en la Casa Consistorial, no incumpliría la legislación. Para evitar entrar en la ilegalidad, ha utilizado a tres miembros de Bildu del Parlamento Vasco. Así podía excusarse en que la ikurriña presidía el balcón municipal como gesto de respeto hacia las parlamentarias.
La delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, ha explicado que, según la Abogacía del Estado, la presencia de las parlamentarias vascas "no permite que ondee la ikurriña, porque su visita tiene que ser oficial". "No vale su sola presencia ni la de cualquier parlamentario o cualquier autoridad. Debe ser una visita institucional", ha puntualizado.
459 actos en 9 días
La ikurriña en el balcón municipal no ha sido el único guiño abertzale de quien dice ser el alcalde de todos los pamploneses y pamplonesas. En la plaza consistorial unas enormes pancartas reclamaban el acercamiento de los presos etarras y ensalzaba lo que consideran prisioneros políticos.
Afortunadamente, una vez estallado el cohete, la alegría y diversión se ha extendido por la ciudad miles de personas están ya inmersos en plena fiesta y alejados de la política. Hasta el 14 de julio, el Ayuntamiento de Pamplona ha organizado 459 actos, uno cada menos de media hora. Música, bailes, fuegos artificiales y los famosos encierros de toros entre otros muchos actos harán de Pamplona una ciudad en la que el tiempo se para, en la que no existirá otra cosa que alegría y diversión. Una forma de desconectar de la rutina del resto del año.
Aunque lo más bonito y divertido de los Sanfermines no son los actos programados, sino lo que surge espontáneamente, esos amigos que se conocen en cualquier rincón de la ciudad, esa anécdota que no se esperaba o esa sorpresa que surge así, porque son Sanfermines.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.