Agricultura cifra en 2.500 las hectáreas de viña y frutal dañadas por las tormentas en La Rioja Baja

De las 14.000 hectáreas de superficie que albergan estos municipios, Erro cifró en 2.500 las afectadas, entre ellas 650 de viñedo, 400 de olivar, 320 de peral, 850 de almendro, 80 de ciruela, 150 de melocotón y nectarina y 90 de manzano. Según las estimaciones de la Consejería, los daños oscilan entre el 20 y el 100%.

La visita de Javier Erro comenzó en Quel, donde se encontró la mayor parte de las ciruelas en el suelo, además de tocadas por el granizo. Una ciruela que estaba a unos días de poder ser recogida y en la que el cálculo es que el 80% de la cosecha está dañada.

En cuanto a viñedo, la nota negativa de cara a los resultados de la cosecha es que las tormentas han llegado cuando las uvas estaban enverando, es decir, en ese momento en el que comienzan a teñirse. «Es una fase crítica en cuanto a lo que puede afectar a conseguir unos parámetros de calidad correctos», apuntaba Erro.

El consejero de Agricultura destacó la repercusión del viento, además del granizo, de las tres tormentas que confluyeron. «En los perales, sobre todo en los de pera conferencia, ha tirado mucha fruta», describía Erro. La consecuencia de este suceso es que esa pera, a pesar de no estar dañada por la piedra, queda ya desechada pues, al no estar terminada de formar, no vale ni para zumo.

Además de pera, el viento tiró mucha almendra, hasta el 80%, al igual que oliva en un año en el que se esperaba una cosecha muy buena, llegando también hasta el 80%.

Continuando con la fruta, los daños en melocotón y nectarina afectan en algunas zonas hasta el 50%, principalmente en la variedad de la carne amarilla de la segunda, la que alcanza mayor cotización en el mercado.