Claman venganza

Éste es el enfrentamiento más complicado que les queda a las azules, que viajan sin ningún miedo y sin presión, ya que son conscientes de que un triunfo prácticamente les hace acreedoras de unos de los dos primeros lugares del Grupo A de liga FEV. Pero una derrota no sería ningún drama, debido a que las opciones seguirían intactas para luchar por la fase de ascenso.

La cancha del Sanse es casi inexpugnable: las madrileñas sólo han cedido un set, contra el Gervasport, en todo lo que llevamos de temporada, con lo que la empresa es muy complicada. Ambos conjuntos llegan tras superar con comodidad sus anteriores duelos, las de Haro aplastaron por 3-0 a la A.D. La Curtidora, que no se jugaba nada, y las sanseras derrotaron por idéntico resultado a Laredo El Divino.

Las chicas entrenadas por Ángel Babio aventajan en dos puntos a las azulinas, pero éstas tienen un partido menos. De ganarlo, igualarían a las de Madrid en lo alto de la tabla. Ambos conjuntos han seguido una trayectoria muy similar durante la temporada, cosechando únicamente dos derrotas en su casillero.

A pesar de que el San Sebastián de los Reyes, tenía al principio de temporada la mejor plantilla de la categoría, con el único objetivo de ascender a Superliga, los directivos sanseros han decido reforzarse en el mercado invernal, para tratar en lo posible de evitar el descalabro de el play-off de ascenso del año pasado. Para ello han cortado a la colocadora Aline Galán, a pesar de ser un fichaje de esta temporada, para dar paso a la central brasileña Carolina Antunes, procedente del Brasil Telecom de liga paulista, y que en la temporada anterior jugó en la máxima división nacional para el San Cugat. También han contratado a la colocadora carioca Carina Puccinelli, que llega del Técnico de Lisboa de la liga portuguesa y cuenta con experiencia en España, puesto que el curso anterior defendió los colores del Almería.

En el encuentro de ida, disputado en El Ferial, las de Madrid se llevaron los dos puntos al imponerse por un ajustadísimo 2-3, en un encuentro en el que la balanza podía haber caído hacia cualquiera de los dos bandos. Las locales tuvieron sus opciones hasta el final. Para el presidente de la entidad jarrera, Ismael Merino, el partido es dificilísimo: «Si queremos ganar no podemos permitirnos ni un solo momento de relajación. Las chicas quieren vengarse de la derrota de la primera vuelta y las veo muy motivadas».