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Ander Azpiroz
Viernes, 2 de septiembre 2016, 21:44
Una vez que Mariano Rajoy ha fracasado en su intento de investidura, Pedro Sánchez debe intentarlo por responsabilidad política. Unidos Podemos no se movió un ápice de la posición que fijó el pasado miércoles. En su intervención antes de la segunda votación, Pablo Iglesias insistió ... por un lado en que sus 67 diputados no facilitarán nunca un Gobierno del Partido Popular. Por el otro, trasladó toda la presión al PSOE para que se decida a intentar formar una mayoría alternativa o bien cargue con la responsabilidad de que los españoles tengan que volver a las urnas por tercera vez en un año. «Si el PSOE no lo intenta -afirmó Iglesias en un tono mucho más duro del utilizado el miércoles- estará diciendo claramente que desea nuevas elecciones y parecería que quiere que se repitan las generales hasta que haya un resultado que les guste». A continuación, incluso, resucitó el fantasma del 'sorpasso' y advirtió de que ésta podría ser la última ocasión de los socialistas para gobernar. «Aprovechen el resultado electoral porque quizá sea la última oportunidad de que ustedes puedan llevar la iniciativa de formar un Ejecutivo decente», dijo.
El líder de Unidos Podemos reconoció que no es optimista respecto a la posibilidad de que Sánchez dé el paso ante la oposición general en distintos sectores del PSOE de una alianza por la izquierda. No obstante, insistió en el mensaje de que los números dan y de que existe una alternativa real a Rajoy y a unos nuevos comicios. Lo que hace falta, sostuvo Iglesias este viernes, es unir a los 180 diputados que han votado 'no' a la investidura del candidato popular. El secretario general de Podemos reconoció que será una tarea complicada, toda vez que las fuerzas independentistas catalanas sólo están dispuesta a apoyar una coalición progresista a cambio de un referéndum de autodeterminación. Ésta es una condición que Podemos apoya, pero que es inasumible para los socialistas.
En lo que también se mantuvo firme Iglesias es en su decisión de no tomar la iniciativa en las negociaciones. Se hizo la pasada legislatura y eso no gustó en las filas socialistas, se argumenta en Podemos. Así, el secretario general del partido morado dejó claro que es «quien aspira a ser presidente quien debe llamar». Si eso finalmente sucede, dijo, Unidos Podemos estará dispuesto a escuchar.
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