Rajoy insta al PP a mantenerse unido pese a los «momentos complicados»

El líder de los populares, que hace unas semanas reconocía que en el PP "hay gente" que prefiere que dé un paso atrás, no vive del todo ajeno a lo que se dice en sus filas, pero sobre todo no admite que desde Ciudadanos pidan su cabeza. "Lo importante es preservar la independencia, no olvidar lo que somos, el primer partido de España, y las decisiones de la organización más grande que hay en España, porque somos 800.000 afiliados, las toma la organización más grande de España y no las toman otros por nosotros", ha defendido en la clausura del congreso de la formación en Pontevedra.

No ha querido nombrar, sin embargo, a Ciudadanos. Tampoco cuando ha vuelto a referirse a su apuesta de gran coalición para formar Gobierno. "El mejor acuerdo para España es que gobierne el primer partido, el que ganó, con el apoyo del segundo, juntos podemos conformar una mayoría para gobernar y podemos incorporar a cualquier otra fuerza política que tenga ganas e ilusión de trabajar por España", ha mencionado sin especificar que esa fuerza es el "cuarto partido", como suele hacer habitualmente.

En lo que no cede es en que el pacto debe pasar por que el Ejecutivo esté encabezado por el PP, "el que ganó". Que los populares teniendo la mayoría absoluta del Senado permitan un Gobierno de otro signo, es, a su entender, "una broma". Y confía en que, aun así, el entendimiento sea posible antes de que las elecciones tengan que ser convocadas de manera automática para el 26 de junio. "Espero que triunfe la razón y el sentido común, algunos tienen que olvidarse del sectarismo, que no conduce a nada y hace daño a todos, incluso al que lo practica", ha arremetido tras prometer que el PP seguirá intentando conformar un Ejecutivo.

El mensaje iba dirigido hacia el PSOE, al que ha recordado, sin mencionarlo, que ahora mismo nadie tiene el encargo del Rey para intentar una investidura. El intento fallido de Pedro Sánchez y su pacto con Albert Rivera fueron, a juicio del presidente, un "fraude" guiado por "intereses partidistas".

Sin pistas sobre Feijóo

El objetivo de la visita de Rajoy era hoy, en cualquier caso, respaldar al PP de Galicia en su puesta a punto para las elecciones de este año en la comunidad. Se había generado mucha expectación en torno a su discurso, por si el líder de los populares daba alguna pista que comprometiera el futuro del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, pendiente de decidir si repite o no como candidato. "Ganaste por mayoría absoluta y volveremos a ganar", ha dejado en el aire, sin embargo, el jefe del Ejecutivo.

Núñez Feijóo, por su parte, ha cerrado filas con Rajoy en un auditorio que gritaba al unísono "¡presidente, presidente!". El respaldo ha sentado como un bálsamo al líder del PP en la ciudad en la que creció y que el pasado 22 de febrero le declaró persona 'non grata'. El candidato popular no sólo ha prometido que conseguirá que le retiren la "condecoración que con tan poco generosidad" le concedieron, sino que ha avanzado un compromiso: "Aquí me he casado, aquí voy a vivir y aquí voy a morir dentro de muchísimos años".