Sánchez y Rivera rechazan reunirse con Rajoy y remiten a equipos negociadores

Rajoy no ha hecho efectiva aún su llamada a Sánchez, de la que ha avanzado su intención de plantearle una reunión para volver a ofrecerle un gobierno presidido por él y sustentado al menos por PP y PSOE, ni tampoco ha efectuado la que prevé realizar a Rivera.

Pero a la espera de esa llamada, Sánchez ya ha adelantado cuál será su respuesta: No se reunirá con él y los contactos entre ambos partidos deben correr a cargo de los equipos negociadores. "Le digo a Rajoy que para hablar de investiduras, hay que hablar en los equipos negociadores. Vamos a seguir intentando construir esa mayoría parlamentaria que propicie que haya un gobierno de cambio", ha afirmado el dirigente socialista. Pero ha vuelto a tender la mano al PP para dialogar sobre grandes asuntos de Estado.

En ese sentido, el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, ha explicado que han decidido ofrecer una reunión al PP para que "no se sientan víctimas" y sus dirigentes no digan que se pretende establecer un "cordón sanitario" en torno a su partido.

Albert Rivera se ha unido a la negativa de Sánchez de verse con Rajoy. Lo ha hecho por boca de su portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta, quien ha explicado también que deben ser los equipos negociadores de los tres partidos los que dialoguen sobre el documento suscrito por Ciudadanos con los socialistas.

La reunión con Rajoy ha dicho que sólo habría tenido sentido si el líder del PP hubiera intentado su investidura. Pero el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha rechazado los términos del "ménage a trois" que piden PSOE y Ciudadanos para negociar y ha avanzado que la llamada de Rajoy a Sánchez será "inminente".

El líder socialista ha admitido también que su partido, con sus 90 diputados, "no tiene fuerza suficiente" para formar un gobierno monocolor, por lo que ha asegurado que no se cierra a entablar una coalición con otras fuerzas políticas. "No me cierro a ninguna formulación", ha señalado sin descartar que en un hipotético gobierno encabezado por él, Iglesias pudiera ser vicepresidente. Y se ha mostrado convencido de que logrará ser investido presidente porque el líder de Podemos "al final recapacitará" y se evitará que haya nuevas elecciones.

Sin encuentro de izquierdas

Si no habrá reuniones entre Rajoy, Sánchez y Rivera, hoy tampoco ha habido la que había previsto Podemos junto a PSOE, IU y Compromís porque se ha desconvocado después de que sólo este último partido estuviera dispuesto a acudir al encuentro.

El portavoz de Podemos en el Congreso, Íñigo Errejón, ha responsabilizado al PSOE del "bloqueo" de la mesa de negociación a cuatro, aunque ha dicho que mantiene la propuesta "a la espera de que se decida por un gobierno plural y de cambio".

Alberto Garzón, portavoz de IU en el Congreso, ha considerado que no tiene "sentido político" que Ciudadanos esté en la mesa de negociación para formar un gobierno de izquierdas. En nombre de Compromís, su portavoz en la Cámara Baja, Joan Baldoví, ha instado a los partidos de izquierda a sentarse a negociar.

El PP ha redoblado sus críticas al pacto PSOE-C's, y Rafael Hernando lo ha dado ya por "muerto y enterrado" y "sepultado dos veces" al ser rechazado por la mayoría del Congreso en el debate de investidura de Sánchez.

Además, ha defendido la intención del PP de negociar desde un "folio en blanco". También la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado no entender la actitud de Albert Rivera de pedir al PP que releve a Mariano Rajoy. "Eso no es serio. Hay que respetar a los candidatos, a los votantes y a los militantes de cada uno", ha señalado.

Además, ha recordado que, en campaña electoral, el líder de Ciudadanos dijo que no apoyaría un "gobierno de perdedores" para desbancar a la lista más votada porque eso sería malo para España. "Cada uno debe ser coherente en su vida política", ha subrayado la vicepresidenta.

El secretario de Comunicación de Ciudadanos, Fernando de Páramo, ha asegurado que intentarán que el consenso para formar gobierno sea "lo más amplio posible", pero ha ratificado que es imposible que en el acuerdo que han suscrito con el PSOE pueda caber Podemos.