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Nuria Vega
Viernes, 15 de enero 2016, 01:09
La vicepresidenta del Gobierno en funciones ha reprochado al líder del PSOE su decisión de ceder cuatro senadores a Esquerra y Democracia y Libertad, la candidatura de Convergencia, para que ambas formaciones puedan contar con grupo parlamentario propio en el Senado. Para nosotros e imagino ... que para muchos militantes y votantes del PSOE es bastante incomprensible, y a mí me gustaría saber qué opinan los votantes de Lugo o Cantabria que ven cómo su voto va a servir para dar voz, para dar mayor participación y relieve a los senadores independentistas, ha censurado Soraya Sáenz de Santamaría.
La número dos del Ejecutivo considera un malísimo precedente que Pedro Sánchez haya optado por dar más posición, valor, realce y opinión a los partidos que abogan por la ruptura con España. Si esto es el federalismo asimétrico, este paso es muy preocupante, ha insistido. Aún así, la oferta de Rajoy para un entendimiento a tres bandas con PSOE y Ciudadanos para conformar Gobierno sigue en pie. El acuerdo, según la Moncloa, serviría para garantizar que la soberanía nacional no se ponga en duda, de ahí que Sáenz de Santamaría pida al secretario general de los socialistas que explique las implicaciones de su último movimiento.
Es un error que el señor Sánchez preste sus senadores y, por lo tanto, sus votos, a los independentistas, y la pregunta es a qué está dispuesto a prestarse el señor Sánchez para conseguir lo que no le han dado los votos, ha dejado caer la vicepresidenta, que insinúa la búsqueda de un acercamiento del PSOE hacia las fuerzas secesionistas catalanas cuando está en el aire la suma de apoyos para constituir el próximo Ejecutivo.
Abogacía del Estado
Mientras, el Gobierno sigue a la espera del informe que la Abogacía del Estado elabora sobre la toma de posesión del presidente catalán en la que Carles Puigdemont proclamó su lealtad al pueblo de Cataluña, pero obvió la Constitución y el Rey. Además, los servicios jurídicos analizan, según la Sáenz de Santamaría, las competencias atribuidas a la nueva consejería de Asuntos Exteriores por si hubiese visos de ilegalidad. Sobre estos primeros días del Gobierno de la Generalitat, ya lo dijo el presidente, no vamos a dejar pasar una actuación que pueda ser contraria a la Constitución y las leyes, ha reiterado la vicepresidenta, que avanza que se estudiarán todos los pasos del Ejecutivo y del Parlamento autonómico.
Por ahora, no ha habido contactos entre el Gobierno y la Generalitat. El presidente confirmó, de hecho, el pasado miércoles no tener prevista ninguna reunión con Puigdemont. Nosotros lo que le pedimos es que se ajuste a la legalidad, y eso no quiere decir que no vayamos a hacer lo hecho durante toda la legislatura, ha zanjado la vicepresidenta, que fija como objetivos del Ejecutivo en funciones garantizar que no se perjudiquen los servicios públicos y que se cumplan la Constitución y las leyes.
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