Denuncian que un inspector de los mossos impidió detener al agresor de un agente en Salou

Según fuentes cercanas al caso, el agente, que había participado en el operativo contra la red de importación de productos falsificados, se incorporó al cordón policial que los Mossos establecieron cuando un grupo de compatriotas de la víctima, Mor Sylla, de 50 años y origen senegalés, se concentraron en la zona para protestar por lo ocurrido. Una de las personas concentradas se acercó hacia las 8 de la mañana al cordón policial y, sin motivo aparente, le dio dos puñetazos en la cara al agente, según las mismas fuentes.

El agresor, un hombre alto, corpulento y de origen africano, había captado la atención de los policías previamente porque estaba muy nervioso y no paraba de insultar e increpar a los agentes que permanecían en el cordón, que se formó para salvaguardar el escenario del suceso y permitir la retirada del cadáver. Según fuentes del operativo, el agresor había intentado atravesar en varias ocasiones la línea policial e incluso llegó a empujar a una mujer contra los policías.

Tensión en aumento

Tras recibir los dos puñetazos, el agente se dirigió hacia el agresor, reforzado por los compañeros de línea, y le intentó retener para proceder a su detención, como autor de un delito de atentado y para evitar que siguiera encrespando los ánimos del resto de personas concentradas, ya que la tensión en la zona iba en aumento. Sin embargo, según las mismas fuentes, un inspector se acercó a él, le tiró por el chaleco y le impidió que detuviera al agresor, por lo que el mosso se incorporó de nuevo a la línea policial.

Poco después, el inspector se dirigió hacia el agente para preguntarle cómo se encontraba, porque había presenciado la agresión, ante lo que el mosso le dijo que no tenía lesiones de importancia y que cuando tuviera la ocasión trataría de detener al agresor, que continuaba en la zona insultando y amenazando a los agentes. El agresor, según las mismas fuentes, se encontraba en un grupo de unas veinte personas y amenazaba al agente al que había dado los puñetazos con frases como "que te mato, tú y yo solos y te mato".

Detener al agresor

Cuando el mosso le comunicó al inspector su intención de intentar de nuevo detener al agresor, éste le ordenó que no arrestara a nadie, según las fuentes. El agente insistió alegando que el agresor había cometido un delito y que intentaría detenerle, ante lo que el inspector zanjó la discusión advirtiéndole que no le detendría. El mosso obedeció las órdenes de su superior y dio por sentado que posteriormente se darían las indicaciones para poder identificar y detener al agresor. No obstante, las fuentes consultadas han asegurado que finalmente el agresor no fue ni identificado ni detenido.

A raíz de esta denuncia, un portavoz de la Trisindical de los Mossos d'Esquadra, que agrupa a los sindicatos SPC, SME y CAT, ha anunciado que instarán al comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, a que inicie las acciones oportunas para poder detener a este supuesto agresor.