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Ander Azpiroz
Viernes, 14 de agosto 2015, 01:40
Fue una reunión legal y éticamente irreprochable, celebrada con luz y taquígrafos y sobre un tema personal. Jorge Fernández Díaz ha mantenido hoy en el Congreso que recibió a Rodrigo Rato en su despacho del Ministerio en el cumplimiento de sus funciones al frente de ... Interior. Entendí que era mi deber realizar ese encuentro, ha justificado el ministro para contestar a la denuncia por prevaricación, omisión del deber de perseguir delitos y revelación de secretos presentada por el PSOE o las peticiones de dimisión del resto de fuerzas de la oposición.
En su comparecencia -ordenada por Mariano Rajoy- ante la Comisión del Interior de la Cámara baja, Fernández Díaz ha explicado las circunstancias de verdad que rodearon la reunión con el exvicepresidente durante los gobiernos de José María Aznar, actualmente imputado en varias causas de índole económico. Antes, el ministro se ha quejado de que la oposición no le brinde ni si quiera un mínimo margen de confianza. Así, ha denunciado haber sido víctima de manipulaciones sesgadas que han llevado a algunos a afirmar que la reunión tuvo como objetivo interferir en la Justicia. Lejos de eso, ha asegurado el ministro, Rato le solicitó la cita debido a una preocupación fundada por su seguridad personal y la de su familia. A modo de justificación Fernández Díaz ha citado 400 mensajes de Twitter contra el exministro de Economía y su familia.
El titular del Interior ha recordado que, en su condición de exvicepresidente, tiene un servicio de protección a cargo de Interior.
Rato, le comunicó así durante la reunión su inquietud ante el hecho de que su nivel de escolta sea rebajado en un momento en el que se siente especialmente amenazado.
Durante la reunión no se habló sobre la situación procesal del exvicepresidente ni de las investigaciones policiales de las que es objeto, ha mantenido Fernández Díaz, que ha zanjado que lo que le pase al señor Rato con la Justicia no es de mi incumbencia, pero su seguridad sí lo es.
La versión del ministro contrasta con la ofrecida por el propio Rato sobre el encuentro. "Hablamos de muchos temas, como de Cataluña y otras cuestiones, además de todo lo que me está pasando", manifestó el exvicepresidente a El País tras estallar el escándalo.
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