Vuelos suicidas en la historia de la aviación

El primer caso oficial data de 1976, cuando un piloto ruso causó muerte de doce personas tras estrellar un Antonov 2 contra un bloque de edificios de Novosibirsk, donde vivía su exmujer, de la que se había divorciado recientemente. Ya en 1979, en Colombia, un mecánico de 23 años de edad que acababa de ser despedido entró en un hangar en el aeropuerto de Bogotá y robó un avión de transporte HS-748 militar, estrellándolo en una zona residencial, donde murieron cuatro personas.

En 1994 un ingeniero ruso de las Fuerzas Aéreas robó una aeronave y se estrelló al quedarse sin combustible. Por último, en 1999 un capitán de Air Botsuana, que había sido apartado de sus labores por razones médicas, despegó un ATR-42, hizo varias demandas por la radio y finalmente declaró que iba a provocar el accidente, estrellando el aparato contra dos modelos iguales que se encontraban en una pista de la base de Gaborone.

Casos discutidos

Otro caso más conocido, aunque discutido, es el del ATR-42 de Royal Air Maroc que se estrelló en 1994 contra la cordillera del Atlas, en Marruecos, poco después de despegar desde Agadir, causando la muerte de 44 personas. A pesar de que las informaciones señalan como la causa del siniestro la decisión del capitán de desconectar el piloto automático y dirigir hacia la superficie la aeronave, la Unión de pilotos marroquíes siempre ha desmentido esta teoría.

En 1997 el vuelo Silk Air 185, en el que un Boeing 737 cubría la ruta entre Yakarta y Singapur, se estrelló en Indonesia tras un rápido descenso. Las autoridades indonesias no fueron capaces de determinar la causa del accidente aunque recurrentemente se ha señalado que el capitán, que pasaba entonces por dificultades laborales y económicas, desconectó ambos registradores de vuelo e hizo descender el aparato cuando el primer oficial había salido de la cabina.

Sin embargo, la mayor tragedia aérea vinculada a un suicidio de la historia data de 1999. Entonces el vuelo Egypt Air 990 registró un rápido descenso hacia las aguas del Atlántico apenas media hora después de haber despegado desde el aeropuerto JFK de Nueva York. La investigación del accidente, que provocó 217 muertes, determinó que el siniestro fue causado por un acto deliberado del primer oficial a bordo, aunque nunca se analizaron las causas de su decisión y las autoridades egipcias rechazaron la versión. Otro caso sonado y el más reciente es el del desaparecido MH370 de Malaysia Airlines -no incluido en la base de datos como causado por pilotos suicidas-, cuya versión oficial apunta a un acto deliberado, algo imposible de determinar ante la ausencia de los restos del Boeing 777, cuya búsqueda en el océano Índico continúa.