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Melchor Sáiz-Pardo
Jueves, 26 de marzo 2015, 10:55
Un avión de la compañía Vueling que cubría la línea entre Barcelona y Munich ha aterrizado de emergencia en el aeropuerto de El Prat después de que la tripulación, minutos después de despegar, detectara olor a quemado y escuchara sonidos extraños en el motor y ... crujidos metálicos, según han informado a este periódico fuentes de Aviación Civil.
El vuelo era el VLG1812 que partía de Barcelona a las 7.00 horas y tenía previsto llegar a Múnich a las 9.05. En el aparato se encontraban en ese momento 137 pasajeros y seis miembros de tripulación, incluidos los dos pilotos. El avión ha aterrizado sin contratiempos, después de sobrevolar en círculo unos minutos el Mediterráneo.
Tras la incidencia los pasajeros han sido recolocados en otro aparato, que ha despegado a las 9.50 horas del aeródromo barcelonés. Doce pasajeros, no obstante, se han negado a volver a embarcar tras la experiencia vivida.
Fuentes de Vueling han señalado que se trata de un "procedimiento estándar" y que el regreso a tierra ha sido exclusivamente por razones de seguridad. La compañía también ha anunciado que devolverá el dinero o cambiará los billetes a todos los pasajeros que han preferido quedarse en tierra.
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