Emotiva marcha en Madrid por Palestina

En la marcha, que ha discurrido pacíficamente desde la madrileña plaza de Tirso de Molina, pasando por Jacinto Benavente hasta llegar a la Plaza Mayor, se podían observar personas de todas las edades. Familias con niños pequeños que corrían divertidos entre la gente, gente con bicis o con perros, ancianos que gritaban a pleno pulmón. La causa los aunaba a todos. Como a Manuel, madrileño de 72 años, que con el libro de Tormenta en Oriente Próximo bajo el brazo ha acudido con su mujer y una amiga porque como ser humano me da vergüenza aguantar esto, señalaba por encima de los gritos de Estado sionista, Estado terrorista.

O como Sena, de 18 años, que había ido con su grupo de amigos a apoyar la causa y se había enterado de la manifestación a través de las redes sociales. Ambos, él, de 72 años, ella, de 18, coincidían en su crítica a la actitud del gobierno español, en silencio, cómplice, la definía Sena, tanto la izquierda como la derecha han pasado en este país, decía Manuel.

Mientras la marcha seguía, seguida de cerca por dos furgones policiales y más agentes en la plaza de Santa Cruz, y a medida que se acercaba a la Plaza Mayor, los gritos de Asesinos se intensificanban cada vez más. En un mar de cientos de personas,sobresalían carteles en los que se podía leer ¡Justicia, NO impunidad!, No al Genocidio Palestino o, el más numeroso, un categórico y simple NO.

En la Plaza Mayor confluían todas las personas de la marcha. En grupos, se organizaban debates en los que las palabras masacre judíos y nazis flotaban en el ambiente, cada una con un argumento y un interlocutor indignado. En uno de esos grupos estaban Sara,de 50 años, y Naima, de 24. Españolas musulmanas y con familia en Palestina. Naima, hija de un palestino que vino a España a estudiar hace 40 años se quejaba de Europa y América calladas y cómplices,y de que no habrá solución hasta que Israel no respete la tierra palestina, la de su padre y sus abuelos, y la que ella sólo ha podido pisar un par de veces, sufriendo toques de queda y ataques del ejército israelí.

El momento más emotivo llegó en el fin que las organizaciones de la marcha dieron al acto. Entre personas visiblemente conmovidas, algunos de los organizadores se dispusieron a leer los nombres de los más de 200 niños asesinados desde el inicio del Margen Protector de Israel. Con sus nombres y sus edades. 2 años, 6 años, 11 años, 13 años, 5 meses las edades y los nombres, muchos con los mismos apellidos, víctimas de ataques en los que habían muerto familias enteras, iban siendo leídos por diferentes personas,algunas con voces entrecortadas, otras con gritos llenos de rabia. La Plaza Mayor en un silencio tenso y lleno de emoción, con muchas personas entre la multitud que escuchaba visiblemente emocionadas. No les olvidaremos, descansen en paz, Paz y libertad para el pueblo palestino concluyeron. Y la gente se quedó en grupos en la Plaza Mayor, debatiendo, envueltos en banderas palestinas, digiriendo los 200 nombres de niños matados por un conflicto que ya dura 70 años, mientras en Madrid se hacía de noche.