La carretera N-232 se cobra sus dos primeras víctimas mortales del 2017 en una colisión frontal en Arrúbal

Según informó la Delegación del Gobierno en La Rioja, el accidente se produjo a las 15.45 horas en la zona donde se inicia el puente sobre la autopista AP-68, en un punto en que confluyen las jurisdicciones de Arrúbal y Murillo de Río Leza, aunque en términos de la primera localidad.

Las mismas fuentes precisaron que el siniestro tuvo lugar cuando uno de los turismos implicados invadió el sentido contrario. Como consecuencia del brutal choque, falleció en el mismo lugar del accidente un vecino de Arnedo de 67 años de edad. Éste viajaba solo en un Toyota.

El otro vehículo involucrado en la colisión, un Ford Focus, trasladaba a dos ocupantes, un hombre y una mujer, que fueron evacuados al servicio de Urgencias del hospital San Pedro. Salud confirmó que el varón falleció nada más entrar en el centro hospitalario sin que nada se pudiera hacer para salvar su vida, mientras que la mujer permanece ingresada estable dentro de la gravedad. El hombre tenía 69 años y era vecino de Zumárraga (Guipúzcoa) al igual que la mujer de 64 años.

Al lugar del accidente se desplazaron la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, los servicios de emergencia y los Bomberos del Ayuntamiento de Logroño, que tuvieron que llevar a cabo unas complicadas labores de excarcelación del vecino de Arnedo muerto en el lugar de los hechos, dado el fortísimo impacto en el Toyota que conducía y el estado en que quedó su turismo.

Tras el accidente, en la zona se registraron retenciones muy importantes, con filas de vehículos de varios kilómetros, porque se tuvieron que cortar ambos sentidos para auxiliar a las víctimas. La Guardia Civil estableció un paso alternativo de vehículos y la circulación quedó restablecida por sendos carriles minutos después de las 18 horas.

El siniestro mortal, el primero de este año en la N-232, suma dos nuevos fallecidos a la negra estadística que arrastra esta carretera que vertebra La Rioja. En el 2016 un total de ocho personas perdieron la vida en esta nacional en siete accidentes, lo que sitúa a esta carretera como la que contabiliza una mayor mortalidad en la región.

A lo largo del 2015, en la N-232 se produjeron seis siniestros con un fatal desenlace de diez muertos.