El gusto por el fuera de foco

Luego cruzó el Ebro. Javier Erro, otro navarro, histórico pilar de los Ejecutivos de Sanz durante 20 años y al que Ceniceros sacó ayer de su equipo de trabajo, le 'fichó' en 1995 para un cargo similar en La Rioja. Acabó siendo su delfín y dio el salto a la primera línea política en el 2007 ganándole la carrera, decían entonces las crónicas, a Pedro Sáez Rojo, hoy escudero de Cuca Gamarra en el Ayuntamiento de la capital. Nagore, desde una posición más técnica que política, es uno de los tres 'supervivientes' a Pedro Sanz.

No ha sido una cuestión de azar. No ha sido casualidad. Los méritos acumulados durante su gestión son los que mantienen a Nagore al frente de una de las carteras de mayor peso en la economía de la región. No en vano el Rioja está en sus 'dominios'. Pero junto a esa experiencia, su propia personalidad, su talante, su capacidad de diálogo y de búsqueda de acuerdos hacen de él un consejero bien valorado que ha sabido mostrar cintura.

Como le pasó a él en el 2007, una de las suyas, María Martín, también ha dado el salto desde una dirección general a una Consejería, la de Salud.

Casado y padre de cuatro hijos, el último incendio que ha tenido que sofocar fue el de la crecida del Ebro y la rotura de las motas de protección en La Rioja Baja, en donde tuvo que hacer complicados equilibrios entre las expansivas competencias de la CHE, las del Estado y las propias. El Rioja también anda revuelto al otro lado del Ebro.

La incorporación de los jóvenes a la agricultura y a la ganadería, los productos de calidad y la mejora de los rendimientos y de las explotaciones y la aplicación de la nueva PAC serán algunos de sus pilares en la legislatura que ahora estrena.