«Hay clientes que piden arreglar sólo lo justo para salir del paso»

Los trabajadores del ramo dan fe de ello. Sin llegar a generalizar -«cada negocio es un mundo»- Carlos San Martín confirma cómo reparaciones que en otros momentos se contaban con los ojos cerrados ahora se miran con lupa. «Hay clientes que siguen mimando su coche, pero otros tantos que piden arreglar sólo lo justo para salir del paso y demoran algunos arreglos que no son imprescindibles para circular», explica este profesional con casi 40 años de experiencia que, desde esa amplia panorámica, observa cómo la variable económica determina mayoritariamente las decisiones del usuario. «Las reparaciones a partir de los 10 años de antigüedad suelen ser más cuantiosas, y no son pocos los que, llegado el caso, se plantean directamente cambiar de modelo a la vista también de la rebaja de precios que se ha dado en los vehículos nuevos», confirma desde su taller en la calle Manzanera.

En ese cambio de tendencia juegan también los avances y las mejoras técnicas. «Antes era obligado un cambio de aceite a los 3.000 kilómetros; hoy te permite hacer 30.000 hasta volver a hacerlo», recuerda.